Durante décadas, el aterrizaje en Marte se ha dado como el siguiente paso lógico en la exploración espacial tras aterrizar en la Luna en 1969, pero la NASA también investiga formas de enviar una misión tripulada a un vecino aun más impresionante, el gigante Venus.
La atmósfera de Venus parece ser un destino maravilloso para su estudio científico y la futura exploración humana. Un vehículo más ligero que el aire podría llevar instrumentos y sondas, o un vehículo hábitat para una tripulación de dos astronautas durante un máximo de un mes. Este tipo de misión requiere menos tiempo en completarse que una misión tripulada a Marte, y el medio ambiente de Venus a 50 km de altura se encuentra relativamente favorable, con una presión atmosférica, una densidad, gravedad, y protección contra la radiación similares a las de la superficie terrestre.
Los Investigadores de la instalación de Langley de la NASA han desarrollado el concepto operacional (ESTRAGO) como un posible medio de la exploración del planeta más cercano a la Tierra. ESTRAGO implica el envío de lo que es esencialmente un dirigible y dos astronautas en una misión de un mes para flotar por la atmósfera del planeta, tal y como se muestra en este vídeo. Más información…