Después de la investigación realizada tras la operación Escudo Defensivo (2002) y la Segunda Guerra del Líbano (2006), el comandante de las Fuerzas Terrestres de las IDF decidió construir un centro de entrenamiento de combate urbano, el escenario de la guerra moderna. Al comprender que el campo de batalla ha realizado una transición desde el territorio abierto a barrios cerrados que claramente, limitan con espacios urbanos, se construyó el Centro de Entrenamiento de Combate Urbano (CECU).
El CECU está en pleno funcionamiento y proporciona a los soldados israelíes las herramientas necesarias para entrenar antes de entrar al campo de batalla del siglo 21.
El centro de entrenamiento, considerado como una de las instalaciones militares más avanzadas del mundo, consiste de 600 estructuras individuales, que simulan una auténtica ciudad moderna desierta. Entre las estructuras hay edificios de hasta ocho pisos de altura, complejos de chozas y barrios indigentes densamente poblados, escuelas, negocios, edificios públicos y mercados.
El entrenamiento en el CECU, pone un énfasis especial en uno de los desafíos más grandes del combate en grandes ciudades y zonas habitadas: la población civil que vive en estos centros urbanos, usada por los terroristas como escudos humanos. Los instructores del centro buscan minimizar cualquier daño a civiles que pudiesen encontrarse en la escena de combate. Contrariamente a lo que hacen los terroristas, los oficiales de las FDI, enseñan a sus soldados como actuar para seguir siendo uno de los ejércitos más éticos del mundo, evitando de manera activa el daño innecesario a civiles. Por esta razón, cada soldado que arriba al CECU recibe una instrucción especial de como distinguir terroristas de residentes urbanos, facilitando el foco en operaciones precisas que involucran al enemigo, y sólo a él.
Además de las FDI, otros países y fuerzas armadas de todo el mundo se han enfrentado con las dificultades que presenta la guerra urbana. El Centro comprobó ser eficiente y eficaz para las FDI, que luego abrió las puertas para que otros países también puedan enviar sus tropas a entrenar en el CECU.
A pesar de la imagen masculina atribuida al CECU, muchos de los soldados que operan en el centro, son, de hecho, mujeres. Las mujeres han tomado una función crítica manteniendo la instalación del campo de entrenamiento como uno de los centros líderes en el mundo. Entre las funciones ejercidas por mujeres en el centro de entrenamiento se pueden encontrar operadoras de hummers de combate e instructoras de tiro.
Fuente: IDF
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