El incendio del cementerio de neumáticos de Seseña es la más clara demostración de que los políticos españoles no sirven para nada, salvo para disfrutar de un poder y de unos privilegios que no merecen. El incendio del mayor cementerio de neumáticos de Europa se veía venir, pero ninguna autoridad o administración supo afrontar el problema, exhibiendo todos una incapacidad y torpeza insolentes e insoportables para cualquier sociedad democrática.
Aunque lo nieguen, hay riesgos graves para la salud pública y prueba de ello es que más de 7.000 personas ya han sido evacuadas.
En 2003, el cementerio fue declarado ilegal por no respetar las normas medioambientales y los expedientes administrativos se acumulaban. Pero no se hizo nada.
España tiene más políticos viviendo del erario público que Alemania, Francia y Gran Bretaña juntos, pero ese océano de inútiles innecesarios bien pagados no solo no nos sirve para nada sino que, por el contrario, todo lo que tocan o gestionan suele ir mal y cualquier problema que afronten empeora.
España necesita una regeneración urgente y profunda para acabar con la plaga de los políticos ineptos y corruptos, entes de que ellos acaben con la nación.
La extinción del incendio puede durar semanas y los gastos serán de decenas de millones, con riesgos de salud, medioambientales y hasta riesgo de paralización del tráfico aéreo en Barajas. Todo obra de políticos ineptos que cobran por su torpeza y que aparecen en los medios como estrellas.
Francisco Rubiales
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