El jefe del Pentágono critica a la OTAN y pone en duda su futuro

alianza militar de Estados Unidos con Europa —la piedra angular de la política exterior estadounidense durante seis décadas— encara un futuro "nublado, si no es que sombrío", dijo el secretario de Defensa norteamericano Robert Gates.

En su último discurso como jefe del Pentágono, Gates puso en duda el futuro de la OTAN y dijo que la avaricia de sus miembros a la hora de aportar dinero y pertrechos, y para tomar decisiones audaces, podría acelerar el cese del respaldo estadounidense. La Organización del Tratado del Atlántico Norte fue fundada en 1949 como freno a la agresión comunista, pero tras la Guerra Fría ha tenido dificultades para encontrar una causa que justifique su existencia.
"Los futuros líderes políticos de Estados Unidos —aquellos para quienes la Guerra Fría no fue una experiencia formativa como lo fue para mí— quizá no consideren justificado el rédito generado por la inversión estadounidense en la OTAN", indicó el funcionario a un grupo europeo de investigación en el último día de su periplo de 11 días por el extranjero.
Gates no ha ocultado su frustración con la burocracia de la OTAN y las enormes limitaciones impuestas por muchos gobiernos europeos a su participación militar en la guerra de Afganistán. Al principio de su mandato, criticó a los líderes de la alianza por no aportar más soldados y unidades de choque, pero sin resultados palpables.
Con todo, la valoración hecha el viernes por Gates del incumplimiento de los miembros de la OTAN, cargando el peso de las operaciones a Estados Unidos, fue inusualmente hiriente y franco. Agregó que las dos operaciones militares más importantes de la alianza —Afganistán y Libia— ilustran la debilidad y el fracaso de la alianza.
"La descarnada realidad es que disminuirán el apetito y la paciencia en el Congreso de Estados Unidos —y en el mundo político estadounidense — por gastar cada vez más preciosos recursos en nombre de naciones que al parecer no están dispuestas a destinar los recursos necesarios o realizar los cambios necesarios a la hora de ser socios serios y capaces en su propia defensa", insistió Gates.
"Esos aliados —agregó— están "dispuestos y deseosos de que los contribuyentes estadounidenses asuman las crecientes cargas de seguridad causadas por la reducción de los presupuestos de defensa en Europa”.

MKL Noticias (@mklnoticias) :: IAR Noticias

MKL Noticias (

@mklnoticias

)