Hay frases que por su belleza, armonía y verdad guardan un especial recuerdo y quedan plasmadas en nuestro subconsciente. Frases célebres, claras, escuetas, directas y sinceras que, a veces, nos hacen recapacitar (y reflexionar). El mundo del libro no es ajeno a ellas y he aquí unos ejemplos en torno al libro mismo, la lectura y ese paraíso llamado biblioteca como lo llamó Borges:
El libro
“De los diversos instrumentos inventados por el hombre, el más asombroso es el libro; todos los demás son extensiones de su cuerpo. Sólo el libro es una extensión de la imaginación y la memoria”. Jorge Luis Borges
“Un libro abierto es un cerebro que habla; cerrado, un amigo que espera; olvidado, un alma que perdona; destruido, un corazón que llora”. Proverbio Hindú
“El regalo de un libro, además de obsequio, es un delicado elogio”. Anónimo
“Es un buen libro aquel que se abre con expectación y se cierra con provecho”. Bronson Alcott
“Para viajar lejos no hay mejor nave que un libro”. Emily Dickinson
“Los libros son, entre mis consejeros, los que más me agradan, porque ni el temor ni la esperanza les impiden decirme lo que debo hacer”. Alfonso V
La lectura
“Que otros se jacten de las páginas que han escrito; a mí me enorgullecen las que he leído”. Jorge Luis Borges
“Amar la lectura es trocar horas de hastío por horas de inefable y deliciosa compañía”. John F. Kennedy
“Cuando rezamos hablamos con Dios, pero cuando leemos es Dios quien habla con nosotros”. San Agustín
“La lectura de un buen libro es un diálogo incesante en que el libro habla y el alma contesta”. André Maurois
“Lee y conducirás, no leas y serás conducido”. Santa Teresa de Jesús
“La lectura hace al hombre completo; la conversación, ágil, y el escribir, preciso”. Francis Bacon
La biblioteca
“Siempre imaginé que el Paraíso sería algún tipo de biblioteca”. Jorge Luis Borges
“Ordenar bibliotecas es ejercer de un modo silencioso el arte de la crítica”. Jorge Luis Borges
“Por el grosor del polvo en los libros de una biblioteca pública puede medirse la cultura de un pueblo”. John Ernest Steinbeck
“En Egipto se llamaban las bibliotecas el tesoro de los remedios del alma. En efecto, curábase en ellas de la ignorancia, la más peligrosa de las enfermedades y el origen de todas las demás”. Jackes Benigne Bossuet
En negrita destaco las frases que para mí encierran mucha verdad.
Fuente: Artefactus Teatro