Revista Cultura y Ocio
Hace unos días me enviaba Antonio Sáenz de Miera su más reciente alerta de publicación de una nueva entrada de su blog Allende Guadarrama, que sigo desde que empezó con él el once del once de 2013, a sus setenta y ocho años. «Steve Jobs entre la arrogancia y la caligrafía» es el título, y, aunque está claro quién es la persona protagonista, toma como punto de partida la película de Danny Boyle estrenada en España el primer día del año y que en Estados Unidos está siendo un fracaso por un quítame allá unos cuantos millones de dólares. Yo aún no la he visto; pero lo que me trae de nuevo a mi 'mac' es la manera que tiene Antonio Sáenz de Miera de contarnos cómo logra sentir que la máquina en la que lee y escribe es algo más que un aparato tecnológico. Como lo sabe, lo cuenta. Y es capaz de hablar de su creador con ecuanimidad y de traer a su reflexión el buen gusto de referencias como la que hace a Thomas Mann y lo que dijo sobre algo que está en el alma de estas máquinas, que «la bella caligrafía conduce a las bellas palabras y las bellas palabras conducen a las bellas acciones». Brindo por que este hombre siga durante mucho tiempo delante de esa pantalla en su escritorio.