Título original: Мастер и Маргарита / traducción del ruso de Amaya Lacasa Sancha.
Edición: 3ª ed.
Publicación: Barcelona: Debolsillo, 2011
Descripción física: 480 p., 19 cm.
ISBN: 978-84-9759-226-0
CDU: 821.161.1-31"18"
Signatura: N BUL maePrecio: 9,95 euros en la Casa del Libro
EL DIABLO VISITA MOSCÚ
Este libro lo leí por primera vez hace ya la tira, cuando empezaba a estudiar ruso. Me lo prestó un compañero (eso sí, en español), y recuerdo que me pareció una historia de lo más extraña pero me gustó muchísimo; así que cuando hace poco, echando un vistazo en la Casa del Libro, lo vi y además tan barato, no me pude resistir a la tentación de hacerme con él.
Argumento y personajes
La historia de esta novela son en realidad tres historias que se entremezclan, y la del maestro y Margarita es solo una de ellas. Podríamos decir que en la trama principal, ambientada en Moscú en 1930, el protagonista es Voland, que no es otro que el diablo, aunque aparece camuflado como un profesor de ciencias ocultas. Voland llama la atención porque tiene los ojos de diferente color, y además por su vestimenta todos en Moscú saben que se trata de un extranjero; aunque a todos ellos les despista el perfecto acento que tiene cuando habla en ruso.
Alrededor de esta trama iremos descubriendo las otras dos. Una de ellas es precisamente la que mencionaba, la historia de amor entre el maestro y Margarita. El maestro es un escritor que no consigue ver publicada su historia sobre la vida de Poncio Pilatos y Joshua Ga-Nozri (que en realidad es Jesús de Nazaret) porque todas las editoriales se la han rechazado hasta el momento; esta es la tercera trama, ya que a lo largo de la novela iremos descubriendo fragmentos del manuscrito. Por su parte, Margarita es una mujer de clase alta casada con un ingeniero, aunque no es feliz en su matrimonio y siente que su vida está vacía. Conoce al maestro y se queda prendada de él desde el principio, y de hecho es ella quien le intenta animar a que publique su manuscrito.
El principio de la novela es muy curioso; Voland llega a Moscú con una comitiva muy estrafalaria, y se encuentra en la calle con el poeta Berlioz y su amigo Iván, con los que mantiene una charla sobre la existencia (o no) del diablo. Voland profetiza la muerte de Berlioz, aunque suena tan absurda que ni él ni Iván le prestan demasiada atención... Hasta que ocurre tal y como Voland ha profetizado. A partir de aquí se sucederán una serie de acontecimientos de lo más misteriosos a la vez que, como ya comentaba, iremos descubriendo retazos, intercalados en la trama principal, de la historia escrita por el maestro sobre la vida de Poncio Pilatos y Jesús de Nazaret. Al mismo tiempo, Voland revoluciona la vida de los moscovitas, haciendo que sucedan cosas muy extrañas, como dinero que aparece y desaparece, funciones de teatro muy muy originales en las que pasa de todo, llamadas y telegramas que en teoría se supone que no tienen ningún sentido... En algunos momentos además veremos que tanto las dos tramas actuales como la de la vida de Poncio Pilatos y Jesucristo están de alguna manera enlazadas.
Por supuesto, a lo largo de la lectura iremos descubriendo toda una serie de personajes secundarios, pero quizá los que dan más juego son precisamente los que forman parte de la comitiva que acompaña a Voland. Ellos son Koroviev, siempre vestido con ropa de cuadros y unas gafas rotas; Asaselo, que se pasa la novela metiéndose en toda clase de líos, aunque también de vez en cuando hace cosas útiles, como inventar una crema que rejuvenece a la gente; y por último el personaje más curioso, el gato, que es negro y enorme, y además anda y habla como cualquier persona.
Mis impresiones
Como suele pasar con la práctica totalidad de las novelas de autores soviéticos, en este caso también estamos ante una crítica a la sociedad de la época. La dictadura de Stalin supuso unos tiempos muy duros para la población, y aquí se ponen de manifiesto ciertos aspectos de la vida de por aquel entonces, aunque en muchos de los casos de forma bastante velada. Sí es cierto que veremos situaciones muy injustas, aunque me temo que eso era el pan nuestro de cada día en aquellos años. Lo bueno es que todo se narra en un tono bastante humorístico; claro que a eso también ayudan las situaciones tan surrealistas que se van sucediendo a lo largo de la novela.
Se supone que además estamos ante una novela en cierto modo autobiográfica, porque el propio autor sufrió todo tipo de persecuciones y aunque se sirve de los distintos personajes para ir relatando la historia, en realidad nos cuenta cosas que seguramente le ocurrieron a él en primera persona. Así que se podría decir que, como ocurre con la gran mayoría de escritores soviéticos, nos encontramos con un libro que no se limita a contar una historia cualquiera sino que en realidad es una crítica a la situación política, al gobierno, a la burocracia, a la corrupción... La verdad es que también podríamos decir que es una historia atemporal, porque quitando ciertos detalles propios de cada época, en realidad se siguen dando prácticamente estas mismas cosas y estas mismas situaciones, no sólo en Rusia sino en muchos otros sitios.
Lo más original sin duda es que el autor utiliza tanto el humor como las situaciones disparatadas para contarnos la historia desde un punto de vista diferente. Así, durante la lectura tendremos muy claro que están pasando cosas que no podrían pasar nunca jamás en la realidad; pero las aceptamos precisamente porque sabemos que es una forma como otra cualquiera de narrar unos hechos que si fueran reales no dispondrían de los recursos de los que se vale Bulgákov para narrarlos. Hay a quien los autores rusos no le gustan demasiado, y es verdad que en ocasiones pueden hacerse demasiado lentos, o demasiado pesados, o demasiado pesimistas; pero creo que hay que intentar ponerse, al menos un poco, en su lugar para así poder entender que en cierto modo es normal que tengan esta forma tan peculiar de ser, y desde luego tan distinta a la nuestra muchas veces.
Conclusión
Aunque tengo claro que recomiendo este libro, puede que no os llamen demasiado la atención los autores soviéticos, o que el argumento no os resulte atractivo; en ese caso, y si a todo esto le sumamos lo que ya ha comentado sobre que el estilo de estos autores es un poco peculiar, supongo que no es vuestro libro. Pero si la historia os seduce, si os interesan las novelas que además de contarnos algo lo hacen de forma diferente, y por supuesto si os llama eso de que estemos ante una novela que en realidad hace una auténtica crítica de la sociedad del momento, sin duda lo recomiendo.
La prueba la tenéis en que después de un montón de años me he decidido a leerlo de nuevo...