El mal funcionamiento de los auriculares de Apple

EarPods, el modelo de auriculares de  Apple para sus nuevos iPhones y iPods, se puso a la venta en el mes de  septiembre de 2012. En aquel momento, el diseño y la tecnología de estos auriculares se vendieron como una notable mejora con respecto a los anteriores auriculares de esta compañía norteamericana, merced a las nuevas características añadidas como un micrófono interior y una mayor calidad de sonido.

Sin embargo, pese a  estas mejoras tecnológicas, los EarPods de Apple continúan quedándose atrás con respecto a la mayor parte  del resto de auriculares. Un punto flaco de la compañía de Cupertino.

Los auriculares de Apple no funcionan nada bien

Apple no es una empresa especialista en auriculares ni mucho menos; no trabajan  con la calidad del sonido, sino que se centran, sobre todo,  en la comodidad y la apariencia de los mismos.

Vamos a desvelar varias quejas sobre los auriculares de Apple que muchos usuarios han confirmado en su uso diario. Apple debe mejorar este aspecto y ya mismo.

1º. Se rompen con facilidad…

Cuando uno adquiere un buen par de  auriculares, una de las partes más notables  es el conector, el jack que entra en el  teléfono. Pero n los auriculares de Apple, los conectores no están nada reforzados. Si se hace algún movimiento brusco y se da un tirón del cable, seguramente los cascos se dañarán o incluso se romperán.

2º. Se caen de la oreja cuando se está  corriendo o haciendo cualquier ejercicio

Cuando Apple dio a conocer los nuevos EarPods en 2012, el gigante tecnológico afirmó que  la forma del EarPod se encuentra definida por la geometría del oído, mas no sellan el orificio de la misma manera que otros auriculares.

No obstante, el diseño no se amolda a todas las personas.  Así, suelen caer al correr, al hacer ejercicio o al levantar pesas en el gimnasio.

3º. Dejan que el sonido se pierda

Merced a su  diseño, los EarPods  presumen de contar con un gran sonido a buen precio. Además, destacan por unos bajos muy fuertes. Sin embargo, a medida que se sube el volumen, se incrementa  la probabilidad de que el sonido se escape de los EarPods… y moleste a los demás.

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