Empate justo entre Málaga y Athletic de Bilbao en un encuentro en el que primaron los errores y las imprecisiones por encima del buen juego que proponían ambas escuadras.
Ibai Gómez defendiendo a Joaquín
El Athletic dominó la posesión del balón durante todo el encuentro, logrando así que las ocasiones que gereraba el Málaga fueran menos y más aisladas. Los de Bielsa montaron una red de toques que desembocaban en peligrosas diagonales tiradas en los picos del área e internadas con mucha movilidad por parte de De Marcos, Aduriz y Muniaín.
Por su parte, el Málaga no perdía el buen criterio ofensivo con el balón. Joaquín fue quien mejor movía al equipo ante la poca aparición de jugadores como Isco, Saviola o Eliseu. La jornada de Champions parece haber pasado factura en el físico de muchos integrantes de la plantilla.
Las mejores ocasiones llegarían en la Segunda Parte. Con cambio de delanteros en ambos equipos, Llorente y Roque Santa Cruz entraron en escena para acabar no desentonando en la obra de juego gris que habían creado sus compañeros.
Fue Portillo quien aportó con su entrada en el terreno de juego algo más de empaque en la medular albiceleste. Lástima la recaída de Toulalan, que tuvo que retirarse antes de tiempo. Willy Caballero se mostró de nuevo muy seguro salvando al Málaga de la derrota en varias ocasiones claras que tuvieron los Leones para ponerse por delante.
Tantas imprecisiones con el balón podrían achacarse al césped. El cuál mostraba una buena imagen, pero quizá la altura no fuese la idónea, ya que el problema siempre venía al botar el esférico en el suelo y adquirir trayectorias imprevisibles.
Demichelis, Weligton y Jesús Gámez fueron amonestados por el colegiado por parte del Málaga.
Buen punto para los de Pellegrini que siguen invictos esta temporada. Ahora vendrá una semana de descanso que caerá en la plantilla como un soplo de aire fresco antes del choque frente al Real Betis, el próximo Sábado.