El equipo de Pellegrini realizó un gran primer tiempo, fue en la segunda mitad donde las inseguridades defensivas y el atasco en ataque propició la reacción del humilde rival.
Los primeros compases del partido tuvieron un nombre propio por encima de los demás: Duda.El luso se lució mientras estuvo sobre el césped finalizando su actuación con un golazo de falta imparable para el portero rival.
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Sin embargo, antes habrían de llegar otros tres goles para encender los aplausos de los pocos malaguistas que se congraciaron en el Hotel de Campoamor para ver a sus ídolos.
El primer tanto llegaría de manos de Sebas Fernández, de remate cruzado, en el minuto 11 de encuentro. Fue en el 25 cuando Toulalan se sacó uno de sus remates lejanos de la chistera y clavó el balón en la portería contraria. Poco después, en el 37, Rondón remató un pase de Duda para lograr poner el 0-3 en el marcador. Restaría por ver el ya mencionado gol de Duda de falta, poco antes del descanso.
Con el cambio radical de jugadores de campo, en la segunda mitad cambió el color del partido. El Málaga perdió el control del mismo y el Horadada se crecía ante los vítores de la afición local. Con una inofensiva terna en ataque formada por Joaquín, Buonanotte y el canterano Adrián, los de Pellegrini avivaron la confianza del rival que veía más que posible no irse con el rosco en su cuenta.
Lograron el 1-4 por medio de Kike, con un disparo desde fuera del área. El definitivo 2-4 fue obra de Quino tras un rechace de un desafortunado Pol.
Alineaciones: Málaga: Caballero; Jurado, Demichelis, Malagueño, Monreal; Portillo, Toulalan, Xavi Torres, Duda; Sebastián Fernández y Rondón. En la segunda parte jugaron Pol; Jesús Gámez, Sergio Sánchez, Weligton, Eliseu; Adrián, Camacho, Maresca, Buonanotte; Fabrice y Joaquín.
Horadada: Ros; Javi Rosa, Campillo, Mesegués, Mario; Mario Gómez, Eloy, José María, Micro; Emilio Rodríguez y Martín. También jugaron Luis, Antonio, Kike, Benja, Ensa, Alberto Robles, Koeman, Álex, Tomás, Pedreño y Quino.