Finalizada la mitad de la Liga, el Málaga asomaba la cabeza por encima del descenso. En una de las peores primeras vueltas de su historia, el club no conocía la victoria a domicilio. Los números de casa tampoco eran muy alentadores. El aficionado se acostumbró a sufrir. Lejos quedó la buena gesta de la campaña anterior, cuando se llegó a soñar con Europa, erigiéndose como el equipo revelación.
El primer paso de la presente temporada mantuvo el sueño vivo. Un Málaga renovado casi al 100% goleaba en La Rosaleda al Atlético de Madrid. Un espejismo. Hubo que esperar 4 meses para contar tres puntos seguidos nuevamente. Ahora, el primer partido de la segunda vuelta invita al optimismo. El equipo de Muñiz le tiene cogida la medida al conjunto colchonero. El 0-2 del Calderón se convierte en la primera victoria lejos de Málaga. El once de Muñiz ha dado muchas vueltas. El equipo está plagado de canteranos. Unos evitan los goles -Iván González- y otros los firman -Javi López-. No ha sido el mejor partido del Málaga, pero suman tres puntos vitales para seguir respirando por encima del descenso.
Esperemos que no pasen otros cuatro meses para ver una nueva victoria malaguista.