Los Cuatro Elementos,
Las Cuatro Estaciones
y EL UNO.
El Mandala nos recuerda, como símbolo, la Unidad de la que somos parte:
Orden,
Belleza
Armonía,
y AMOR NATURAL DE LA EXISTENCIA.
La palabra Mandala es de origen sánscrito y significa "lo que contiene la esencia".
Tiene un propósito conservador, al restablecer un orden existente, y además un propósito creador, al dar expresión y forma, a algo que aún no existe, que es nuevo y único.
El Proceso es una espiral ascendente que, una y otra vez vuelve al mismo punto de origen.
Observando el Universo, nos damos cuenta que pareciera que está todo organizado en forma circular y alrededor de un centro en interrelación permanente. Es así como, análogamente con la Naturaleza e inspirados en ella, los Mandala acompañan al hombre desde tiempos inmemorables y están presentes en las diferentes culturas.
En momento de crisis o peligro, la humanidad ha vuelto, de diferentes formas, a lo circular. Esta búsqueda natural de autorregulación se ve acrecentada cuando en lo externo las personas no encontramos respuestas a las necesidades más profundas del Ser.
A través del Mandala la psique humana intenta organizarse en medio del caos.
Jung, empleó la palabra Mandala para designar la estructura que represente el átomo nuclear de la psique humana. Además observó que sus pacientes espontáneamente dibujaban Mandalas como una tendencia natural de autorregulación del psiquismo.Hoy los Mandalas se nos presentan disponibles para todos, para meditar con ellos, pintarlos o crear los propios, como una herramienta de centramiento, integración y sanación, que nos prepara para vivir mejor los desafíos de cada día y asomarnos al Misterio de la Vida.