Revista Insólito
La (aún) misteriosa desaparición del avión de Malaysia Airlines nos tomó a todos por sorpresa, pero la verdad es que esta no es la primera y seguramente tampoco será la última desaparición inexplicable de la historia:
- El Triángulo de las Bermudas:
El Triángulo de las Bermudas es probablemente la zona más misteriosa del planeta. Situado en el océano Atlántico, entre las Islas Bermudas, Puerto Rico y Miami se hizo famoso por la desaparición supuestamente inexplicable de varios barcos. En 1974, el escritor estadounidense Charles Berlitz publicó el libro “El Triángulo de las Bermudas”, donde revisó todas las leyendas asociadas a la zona.
Aún así, el Triángulo lleva sus críticas y ha sido desmentido varias veces. Autoridades como la Guarida Costera de Estados Unidos, por ejemplo, niega que en esa zona desaparezcan más barcos que en otros lugares, y un año después de la publicación del libro de Berlitz, otro libro fue publicado por Lawrence Kusche para desmentir varias de las historias.
- El Mar de los Sargazos:
El Mar de los Sargazos está también en el Atlántico, al este del Triángulo de las Bermudas. Es una zona donde las corrientes oceánicas acumularon cantidades enormes de algas sargazos, lo que convierte entonces a esta zona en una especie de mar en medio del océano.
Fue descubierto por Cristóbal Colon en 1492 y se hizo famoso porque allí desaparecieron sin dejar huella muchos barcos. Al igual que el Triángulo, el Mar de los Sargazos se asocia a la aparición de “barcos fantasmas”: Naves encontradas flotando en el mar sin tripulación ni pasajeros.
Uno de los casos más famosos fue el del Mary Celeste, encontrado en la zona sin señales de daños graves, pero aún así parecía como si los pasajeros y la tripulación hubieran sido evacuados por razones desconocidas, dejando a bordo la ropa, comida para medio año, carga, dinero, joyas y juguetes.
- Mar del Diablo:
Es conocido también como el Triángulo del Diablo o Triángulo del Dragón. Se ubica en la región del Pacífico, alrededor de la isla Miyake y también está asociado con la desaparición de naves. El Gobierno japonés fletó una vez un buque de investigación, el Kaiyo Maru, con más de 100 científicos a bordo, pero desapareció.
Sin embargo, su pérdida no fue tan misteriosa, ya que fue en verdad “tragado” por un volcán que entró en erupción mientras los científicos lo investigaban sin dejar supervivientes.
- El Triángulo de Michigan:
El mapa de las desapariciones va más allá de mares y océanos. El lago Michigan en Estados Unidos, por ejemplo, tiene también su propia zona de misterios inexplicables, como cuando en 1921 el barco Rosa Belle fue encontrado flotando boca abajo sin huella alguna de los 11 miembros de la tripulación.
Aquí han desaparecido también aviones, como el vuelo 2501 de Northwest Airlines en 1950, que se desvaneció cuando atravesaba la zona en su ruta de Nueva York a Minneapolis. El avión llevaba a 69 personas a bordo y de pronto desapareció de los radares: Los socorristas encontraron en el agua restos como asientos y pedazos de cadáveres, pero el lugar de la caída no pudo ser identificado.
- El Triángulo de Bennington:
En Vermont, EEUU, está el Triángulo de Bennington, considerado un área maldita en las leyendas de las tribus indias locales. Entre 1945 t 1950 en esta zona desaparecieron cinco personas de forma inexplicable, con gente a su alrededor. Por algún tiempo se pensó que podrían haber sido víctimas de algún asesino en serie, pero todos los desaparecidos eran demasiado diferentes entre sí como para ser parte del patrón de “caza” de algún loco.
- La Anomalía del Atlántico Sur:
Ya sabemos entonces que tanto en el mar como en la tierra hay zonas que es mejor evitar no más por si acaso, pero ¿Podría pasar lo mismo en el espacio? No es mucho lo que conocemos aún del universo pero cerca de nuestro planeta ya existe una zona peligrosa identificada.
Aunque no es misteriosa como las otras, puesto que tiene una explicación científica, la Anomalía del Atlántico Sur está sobre el océano cerca de Brasil. Allí el cinturón magnético terrestre se encuentra más cerca al planeta que en otros lugares, generando una radiación fuerte que afecta a los satélites y otros objetos que cruzan el área.
A pesar que esta depresión esta sólo a unos cientos de kilómetros de la Tierra, está todavía demasiado lejos para influirnos. Sin embargo, hay gente que supone que el fenómeno podría tener algo de culpa en la catástrofe del vuelo 447 de Air France en 2009, cuando 228 personas murieron.