No, tampoco es un proyecto de genética, ni una mutación aberrante en Chernóbil, de hecho es un proyecto de arte. Así es, el profesor de arte de la universidad de Massachusetts, Sam Van Aken, se dedicó a crear un árbol especial, tratando de injertar 250 tipos distintos de frutas con hueso.
De este árbol nacen 40 frutos distintos
Arte y practicidad
El árbol es bastante bonitos, y por eso es un proyecto de arte, donde brotan melocotones de diferentes colores, de púrpura a amarillo brillante, cerezas, ciruelas y otras frutas nacen del árbol, todas al mismo tiempo, y en una gama de colores increíble, una paleta de colores bastante veraniega que nace del árbol de los 40 frutos.
Los frutos salen de colores diferentes
Ahora hay ya más de dos docenas de árboles que Van Aken ha creado desde 2011, para muchos se está viendo como una solución ecológica para las huertas de frutas ya que ahorraría espacio para que se criarían varias frutas en un poco de espacio sin tener que talar demasiados árboles.
¿Cómo?
Pero la pregunta siempre queda en el aire ¿cómo lo hizo Van Aken? El hombre ha sido invitado a una charla TEDx para explicar sus motivaciones y el proceso de crear el árbol. Fue un proceso bastante largo, arduo y de mucha dedicación.
El profesor Van Aken se dedicó a unir varias cepas de plantas a un árbol madre, todas las frutas tienen más o menos la misma estructura cromosómica, y creando una línea de tiempo de cuidado iban a florecer cada una de las especies que iba injertando, Van Aken programaba los injertos sistemáticamente. Hoy día estos árboles son vistos como un verdadero tesoro y son un poco difíciles de conseguir en el mercado. ¿Te compras uno? Comenta y comparte.Si te ha gustado el artículo, no olvides que puedes ver muchas más historias interesantes y aterradoras para todos los públicos, visitando Ciencia y Curiosidades o la Matrix Holográfica. Te esperamos
Foto Por Cortesía: taringa.net
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