El Mario incomprendido

En la entrada de ayer mencione Isla Delfino como ciudad de vacaciones ideal, vamos ni Marina Dor, y eso ha hecho que me picara el gusanillo de echarme unas partidas al soleado juego del fontanero italiano. El caso es que da la impresión de que Mario Sunshine no está demasido bien considerado para tratarse de un Mario "de verdad" y nunca he entendido muy bien por que, tras echarme unas partidillas y cogerme unos cuantos "shines" solo puedo afirmar que Mario Sunshine me parece tan buen juego como hace unos años ¿entonces por que mucha gente no lo comprendió?

Es cierto que Sunshine tiene un problema importante, es el Mario que sucedió al inigualable Super Mario 64 (exactamente el mismo problema que tuvo Zelda Wind Waker con respecto a Ocarina of Time) lo que le hacia un flaco favor. También fue el primer Mario que se hizo esperar con ganas, Gamecube fue la primera consola de Nintendo que salió sin un juego del fontanero italiano lo que creo unas expectativas enormes con respecto al juego, el nivel de hype (que por aquel entonces todavía se llamaba expectación) que había con Sunshine no lo he vivido con ningún otro juego. Tal es así que yo por aquel entonces retrase un viaje que tenía programado con mi chica de aquella época por coincidía con el finde que salia el juego (es lo peor que jamás he hecho y haré por un videojuego xD).
Esto que os he contando es un atenuante, pero no me parece razón de peso para que Sunshine no cumpliera las expectativas de algunos jugadores, si fuera así a Galaxy le hubiera pasado mas o menos igual. Creo que el principal problema de el juego de Gamecube es que fue un Mario que intento cambiar parte de la filosofía de los juegos del fontanero, me explico. Mario siempre ha sido un personajes que se ha valido por si mismo para avanzar en sus aventuras, siempre ha tenido items a modo de power ups, pero nunca han sido imprescindibles para avanzar, jamás (al menos si hablamos de la rama principal de los juegos del fontanero). Mario Sunshine rompe con esta tradición y coloca a Mario una mochila de agua que cambia radicalmente el planteamiento y la manera de afrontar los escenarios que teníamos en Super Mario 64, muchos jugadores no se adaptaron a esto.

El juego ha envejecido genial gráficamente

¿La pistola de agua no estaba bien implementada? ¿dejaba de ser un plataformas al uso? nada de eso pero la jugabilidad cambiaba bastante con respecto a otros juegos de Mario. Miyamoto decidió que Sunshine debía diferenciarse claramente de Mario 64 y eso no lo iba a conseguir solo con escenarios distintos y un par de "gorras" de poderes mas, así que arriesgo con un "gadget" que alteraba la concepción del manejo de Mario. Para mi el juego es redondo, los escenarios son perfectos, el control del personaje es soberbio, el repertorio de movimientos es grandísimo y la implementación de la pistola de agua le da un toque de aire fresco y un sello distintivo al juego, pero también soy consciente de que muchas veces los jugadores somos muy susceptibles con los cambios en nuestras sagas preferidas, incluso cuando no son muy radicales (a mi mismo me pasa con muchas sagas).
Es curioso como casi todo el mundo coincide, tanto los que quedamos satisfechos con la inclusión de la dichosa pistola de agua como los que no, en que los niveles mas redondos del juego son los retos "clásicos" en los que solo tenemos que recorrer un escenario plataformero old school con Mario, sin mochila ni nada. Para mi esto es una prueba de que en el fondo somos muy inmovilistas y no nos gustan demasiado los cambios, que aunque se nos llene la boca hablando de evolución y originalidad la mayoría esperaba para Gamecube un Super Mario 128 que siguiera la estela de Super Mario 64 sin demasiadas virguerías. Mario Sunshine es un juego que intentó marcar su propio camino aunque fuera sobre las bases que se crearon en Mario 64 (un escenario abierto con las estrellas, en este caso soles, repartidos por el sin tener que ir de A a B) y mucha gente no lo comprendió.

No me digáis que no molan esos calamares

Tampoco quiero decir que el juego no adoliera de otro tipo de defectos, como la poca variedad de entornos en los escenarios si lo comparamos con otros Marios, pero en el fondo ninguno de sus defectos como juego son imperdonables. El mayor problema de Mario Sunshine es intentar cambiar el modo de Mario de enfrentarse a los retos que se le plantean, eso en su día claro. A día de hoy la mayor losa que tiene el juego de Gamecube es ser el Mario que va después de Super Mario 64 y delante de Super Mario Galaxy, lo cual es algo difícil de llevar por muy buen juego que seas. En cualquier caso es un juegarraco, me lo estoy rejugando en el maravilloso Dolphin (emulador de Gamecube y Wii que corre este juego como los ángeles) así que a lo mejor acabáis leyendo un análisis en el que os cuente con mas detalle las muchas bondades y pocos defectos de este juego que tiene el dudoso honor de ser el Mario incomprendido.
@FastETC