

La idea inicial era dejarla en su tono natural -es de haya- después darle una mano de pintura blanca y un buen lijado hasta casi retirar toda la pintura.El decapado del barniz original y el lijado no consiguieron dejarla en el estado que yo quería. Además debido al deterioro provocado por el agua hubo que emplear bastante masilla. Total que era necesario taparla bastante.


Lo de la tapa fue otra historia, ya que me empeñé en cambiarla buscando un no sé qué, total que me lié la manta a la cabeza haciendo cosas raras cuando como de verdad está bonita es así con su encimera original de marmol blanco y encima de tendencia...El resultado final es una pieza que puede encajar encualquier decoraciónya sea de estilo nórdico o más shabby.



