El ministro Morenés besa los pies del Ejército en el caso de acoso sexual a Zaida Cantera

Pedro Morenés ha cargado su metralleta bucal y ha disparado verbalmente contra todo lo que vaya en contra de algunos miembros del Ejército. Su silencio ante el caso de acoso hacia la capitán Zaida Cantera y su orden de hacer callar a una diputada de UPyD, le ha valido para quedar en ridículo ante gran parte del Congreso y la ciudadanía española.
"Carguen, apunten... ¡fuego!". Esto es lo que ha debido pensar el ministro de Defensa, Pedro Morenés, cuando en la sesión del 11 de marzo en el Congreso tenía a su enemigo en el frente, la diputada de UPyD Irene Lozano, y esta le ha preguntado sobre el caso de acoso sexual y laboral que ha sufrido la capitán del Ejercito Zaida Cantera por parte del teniente coronel Isidro José de Lezcano-Mújica.
No hace falta hacer alusión al caso de la capitán Cantera porque de todos es conocido lo que ha ocurrido, lo que ha sufrido y lo que aún está padeciendo después de que algunos miembros superiores, coroneles y generales del Ejército, la hayan señalado como la única culpable de todo esto. 
Tras el turno de palabra de la diputada Lozano, el ministro del Partido Popular ha debido sentirse como en sus tiempos mozos del Ejército. Durante su intervención, ha alabado, leyendo un par de folios sin decirlo desde su propio interior, a todos los miembros del Ejército con palabras como "tolerancia cero frente a las situaciones de acoso sexual y por razón de sexo", aunque no ha dado ningún tipo de detalles sobre el caso de acoso. El segundo de los hijos del IV vizconde de Alesón ha demostrado su educación castrense poniéndose su dedo índice en formación vertical en sus labios mientras alzaba la mirada hacia la diputada de UPyD. O lo que es lo mismo, hablando en plata, ha querido que esta cerrara la boca.
La indignación ha sido latente por parte de todos los políticos de la oposición y del público que se encontraba viendo el espectáculo bochornoso del ministro de Defensa. Entre el público, con cara seria se encontraba la capitán Zaida Cantera que no se podía creer lo que estaba oyendo y lo que estaban viendo sus ojos.
A punto de acabar el Pleno y tras la bronca monumental que recibió, Pedro Morenés comentó: "pido mis disculpas por haber hecho un gesto de silencio". Haciendo alarde de su gallardía, aseguró que su gesto iba dirigido a un poco de ruido que había en el hemiciclo. Eso sí, el querido ministro del Partido Popular, ha mantenido la acusación de "bajeza de moral" como una enfermedad que sufre la diputada Irene Lozano, a la que reprochó tener la "piel muy fina".
Tal vez nos estamos confundiendo con el gesto de hacer callar a alguien con el dedo. Quizás habra que preguntarle a Pedro Morenés si ese es el dedo con el que Defensa ha adjudicado hasta el momento 32 contratos por valor de 13 millones de euros, a Instalaza, la empresa de armas de la que el ministro de Defensa fue consejero al menos hasta 2009. Esta empresa ha sido fabricante entre otros armamentos de las bombas de racimo que fueron prohibidas en 2011 por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. El Gobierno de Mariano Rajoy ha tenido que indemnizar, o más bien premiar, con 40 millones de euros a esta empresa por las pérdidas ocasionadas.
Señor Morenés, de la misma manera que el rey emérito de España, Juan Carlos I, dijo al fallecido presidente de Venezuela, Hugo Chávez: "¿Por qué no te callas?". Tome ejemplo y hágalo, por el bien de todos.