Revista Espiritualidad
Tener una carrera suele ser una de las preocupaciones fundamentales de la vida. Cuando hablo con mis amigas que son mamás, muchas veces manifiestan su inquietud porque su hijo haga una elección a conciencia de su futuro profesional. A la hora de decidir a qué dedicarse , se ponen en la balanza varios factores y de ellos se extrae un batido compuesto por: las preferencias, la habilidades, la posible salida laboral, la entrada económica actual, la entrada económica que puede dejarte en el futuro tal o cual ocupación, etc.
A veces se elige una carrera porque es la mas "conveniente" o porque en la familia hay una tradición y hay que seguir los mismos pasos de padres, abuelos o tíos. Incluso llegamos a renunciar a alguna actividad que uno desarrolla con habilidad y ganas, en favor de una profesión que promete un mejor porvenir económico.
Elegir una una profesión (en el caso de que quieras hacerlo) es importante. Es el lugar desde donde te vas a mover para dar algo al mundo, y el lugar desde donde vas a estar ubicada para recibir todas aquellas cosas que un trabajo hecho con pasión te va a devolver, por eso es fundamental hacer la elección que mas fiel sea a tus sentimientos, la que te dicta el corazón. Estoy totalmente convencida de que cuando uno hace algo que ama, aunque se trate de un trabajo donde hay muchísima competencia o que tiene fama de poca salida laboral, llegará un punto en que verás los frutos. porque dedicarse a algo que te sale de las entrañas solo puede conducirte a éxito.
No creo que sea tan importante estudiar una carrera. No creo que por tener determinada licenciatura o máster precisamente uno vaya a forrarse o ser feliz. Sí creo que hay que saber cómo moverse, de que gente rodearse, acercarse a personas que te sumen y de las que puedas aprender, que te hagan sentir bien y lejos de tirar abajo tus sueños, que te animen a construirlos. Si para esto necesitas un título, entonces a por él, habrás hecho la elección de tu vida, pero si tu objetivo es crecer en un emprendimiento determinado y sientes que el camino es por otro lado, no por el de los estudios universitarios, entonces también estarás en la vía adecuada. Es posible que necesites otro tipo de formación, que tenga mas que ver con lo inmediato de tu proyecto. Muchas de las personas de éxito del mundo no han estudiado : Steve Jobs nunca acabó la universidad y Bill Gates se graduó 32 años después de comenzar la carrera porque se dedicó todo ese tiempo a levantar un imperio. Ellos contaban con un plus, algo que valía mucho mas que cualquier título: confiaban en lo que querían, creyeron en lo que amaban y se ocuparon.
Estoy convencida de que incluso cualquier carrera, o cualquier proyecto que se haga con ganas si se le da el cauce correcto va a triunfar. Recuerdo cuando iba al colegio y quería estudiar literatura, en mi casa no hacían mas que decirme que "me iba a morir de hambre" y al final ¿saben cual fue el resultado? que estudié otra cosa que no me gustó, la dejé y veinte años después volví a mi primer amor, la literatura. Me tomó dos décadas escuchar a mi corazón, pero era lo que me gustaba. No se si desde algún lugar me dedicaré a ello porque hoy en día tengo proyectos que me entusiasman muchísimo mas para llevar a cabo, pero por la noche o en mis horas de ocio, leer los clásicos o redactar los trabajos de clase son mi cable a tierra. Al final se ha convertido en mi hobbby, en lo que me hace descansar y desconectar.
Si en este momento te dedicas a algo que te gusta y te hace feliz, enhorabuena, eres afortunadísima, y mas aún si has dado con la carrera que realmente querías ejercer. pero si no es así, si estás preparándote o trabajando en algo que no es lo que querías entonces párate a pensar. ¿Todavía no tienes claro que es lo que te gusta, que es lo que te haría vibrar? Entonces recuerda cuando ibas al colegio, con qué cosas te entretenías? ¿que decías a los demás? ¿cuáles eran tus sueños?.
No hace falta que dejes ya mismo lo que estás haciendo ahora, por supuesto, solo intenta incluir lo que te gusta de a poco en tu vida, como una vía de escape, después el tiempo dirá. La vida es una sola, y además de trabajar para pagar facturas, está para cumplir sueños, porque por algo están, solo que los hemos acallado por inseguridad, adaptarnos a unas normas en las que en su momento creímos correctas.
A por ellos!!!