Crónicas de Vestuario. –
“El Momento”
“El Momento” fue el último álbum que publicaron Nacha Pop antes de que Antonio Vega emprendiera un dubitativo camino en solitario que sólo alcanzó cumbre en su debut posterior a la ruptura “No me iré mañana”. Nos quedan grandes canciones de ese álbum –atribuidas erróneamente a la leyenda- pero la gente prefiere abrazarse a la leyenda y obviar cualquier tipo de matices. No escapemos a las conclusiones: el Tenerife es, probablemente, uno de los peores equipos de una categoría donde no va a existir la misma igualdad que en las últimas temporadas. Ante semejante tesitura, ganar es tomar ventaja sobre el resto, no vaya a ser que puedan corregir su camino y conseguir alguna victoria sorprendente.
El conjunto azul, con dos disciplinados medios centros como Erice y el siempre despierto Omgba, consiguió neutralizar las tímidas iniciativas de los chicharreros y prolongar su influencia hasta la delantera donde Linares no perdonó. Un cuarto de hora después, Borja Valle, con esa verticalidad marca de la casa, cerró un partido donde había que cumplir al máximo. A pesar de todas las dudas que siempre produce una categoría tan cargada de equipos, parece que los tinerfeños se van a tener que jugar el destino en la zona baja. Y sumar es trascendental. Y así se aplicaron los amarillos, salvándonos de recordar de nuevo a un episodio de la Pantera Rosa.
Asentarse en la zona alta en los primeros compases de la Liga es básico para alimentar las ambiciones. Pero, recuerdo y apoyo la mesura que caracteriza al entrenador azul Sergio Egea, la Liga es muy larga y esto sólo es el comienzo. Partidos donde el once azul muestre este poderío alimentan las esperanzas, que han de discurrir siempre lentas. A los Don Pésimos del “todo va mal” hace falta callarles con argumentos tan concluyentes como los de hoy.
MANOLO D. ABADPublicado en el diario "El Comercio" el lunes 14 de septiembre de 2015