EL MUNDO DE FIRTHU – CAPITULO II- El Mundo de los Hombres-

El primer día en el campo de instrucción número cinco.

La primera noche la pasó despierto Firthu, sin pegar ojo pensando en lo que le deparaba  el futuro, ¿ cuál sería el desenlace final de todo esto?.

–Ferthu: ¿qué estoy haciendo?, ¿por qué no paro de pensar en mañana?, tengo que demostrar que pueblo es el más valiente para honrar a mi familia. No puedo abandonar esto. De granjero tampoco se está tan mal…

Eran frases que rondaban la cabeza de un hijo y nieto de guerreros…

Va pasando la noche, unas ojeras descomunales después del largo viaje y la llegada a su nuevo hogar. De repente suenan los primeros pájaros de un nuevo día,  aunque aún es de noche.

Se escuchan unos pasos de una bota muy pesada y dura …pom …pom …pom … pom… Alguien grita…

¡¡¡Ráaaapido salid todos fuera!!! 

Desconcertados levantan las orejas de la superficie fría y dura que era su cama hecha con tierra y un manto de paja.

Algunos saltan de la cama otros se quedan inmóviles, VAMOS, MOVEOS INSENSATOS, ¡¡¡VUESTROS COMPAÑEROS PUEDEN ESTAR MURIENDO!!!

Así podría ser algún día quizás, según iban saliendo del barracón, una sombra larguirucha les estampaba una espada de madera de un golpe  y un una buena hostia en plena cara, podían sentir la mano huesuda que les golpeaba como algo extremadamente duro.

Firthu, sale corriendo entre la multitud a empujones a través del pasillo inundado de incertidumbre y chicos corriendo, llega hasta la puerta y siente un golpe duro en el pecho instintivamente coge la espada, boquiabierto en ese mismo momento le estampan la hostia.

Una hostia en plena cara una fría mañana, con la cara como un tempano de hielo la oreja le palpita  al inundarse de sangre tras el golpe.

Nota un empujón  en su espalda que lo lanza hacia delante, agarra firmemente la espada por la empuñadura llena de astillas.

Siente que se le clavan las astillas en la piel, como agujas, comienza a sangrar, pero eso no le detiene del pánico que siente en ese momento,  los ojos abiertos como platos.

Esperando que salga algo de la oscuridad no baja la guardia , siente que  se aproxima algo hacia él.

Sin pensarlo suelta un golpe con todas sus fuerzas y algo pesado e inerte cae al suelo, casi todos los aspirantes actúan igual soltando golpes a diestro y siniestro mientras otros corren despavoridos a la descarajada.

Todo esto ocurre en segundos desde que salió del barracón, van pasando los minutos y comienza a clarear el día.

Podemos observar con los primeros rayos de luz como están situados los aspirantes  con las manos ensangrentadas en posición defensiva y aquellos bultos inertes en el suelo no eran más que otros aspirantes con peor suerte que yacían inconscientes en el suelo tras los tremendos golpes…CONTINUARÁ…