El mundo de Marc.

La semana pasada asistí a la presentación de todas las fragancias del universo de Marc Jacobs. Obviamente, asistí al evento sin una pizca de perfume, porque estaba segura que iba a hacer un layering con estas fragancias, una más linda que la otra.
Hay cuatro chicas que encarnan a cada uno de los perfumes de esta colección, cada una con su personalidad determinada. Les propongo conocerlas de a una:

Dorothy, es encantadora, optimista, juguetona. Tiene un espíritu fresco, liviano, es chic y colorida. Su perfume es Dot, la última creación de Marc Jacobs a la venta en el país.
Su frasco es muy llamativo, juguetón y con una tapa exhuberante. Está inspirado en una vaquita de San Antonio: fondo rojo con lunares negros. Esta fragancia efervescente, floral frutal, fue creada por Annie Buzantian y Ann Gottlieb y ganó en 2013 un premio al mejor jugo.
Como notas de salida tiene fruta de dragón, bayas rojas y madreselva. Las notas de corazón son el jazmín, el agua de coco y la flor de naranja; y las notas de base son la vainilla, la madera y el almizcle.

Oh, Lola! es otra de las fragancias de la misma familia floral frutal. Es juvenil, vibrante y provocadora. Su imagen es la actriz Dakota Fanning, una Lolita a la que le gusta coquetear con su aspecto que no se define entre niña o mujer.
Sus creadores, Ann Gottlieb, Calice Becker y Yann Vasnier se inspiraron en la peonía, flor que se representa en la tapa del perfume.
Tiene notas de frambuesa como salida, acompañada por la frutilla salvaje y la pera. Como nota de corazón, estan la peonía y la violeta persa. Como base, la vainilla.

La "hermana mayor" de Oh, Lola! es Lola, una fragancia mucho más intensa, más sexy, con más cuerpo y fuerza. Eso se nota en el frasco, con colores más intensos y que remite a una figura femenina. Es una fragancia muy sensual.
También creado por Yann Vasnier y Calice Becker, esta versión tiene como notas de salida al pomelo rojo y a la pimienta rosa. Las notas de corazón son la peonía fucsia, la rosa y el geranio. Y la base es de haba tonka, musk y vainilla.

La más clásica de las fragancias de Marc Jacobs es Daisy, la primera creación de la marca. Es una fragancia fresca, luminosa, alegre, natural. 
Las notas complejas que componen la fragancia en verdad buscan transmitir naturalidad. El creador de esta fragancia fue Alberto Morillas y se inspiró en una chica corriendo por el campo y en el flower power.
Las notas son frescas y naturales. Por ejemplo, en la salida encontramos frutilla salvaje, hojas de violeta y pomelo rojo rubí. En el corazón, hay gardenia, pétalos de violeta y jazmín y en la base hay almizcle, infusión de vainilla y madera blanca.
Dentro de la familia de Daisy, encontramos los lanzamientos de edición limitada. Se trata de fragancias felices y coloridas, con colores primaverales en su presentación y con notas que alegran a quien la lleva. Por ejemplo, las ediciones de Daisy Sunshine,  fueron lanzadas en invierno con la idea de alegrar el gris de NYC.
Esta versión de Daisy, creada por Harry Fremont, tiene como nota de salida a la grosella roja, y a la mandarina jugosa.  Como notas de corazón, tiene lirio del valle, violeta y lichi. Las notas de base son la piel de durazno, la madera clara y el almizcle.

Por otro lado, la versión Daisy Eau So Fresh Sunshine, tiene en la salida notas como la frutilla, la flor del manzano y pomelo rosado. En el corazón, hay pétalos de jazmín, lirio de día y rosa. En la base, hay hoja de violeta, musgo de roble blanco y madera ámbar.
Este fue el universo de Marc, con opciones para todos los gustos y personalidades (aunque falta que llegue  Honey). ¿Cuál es su preferida? (Debo admitir que Daisy me conquistó, así que quizás se la pida a Papá Noel para Navidad).
Todas estas fragancias pueden conseguirse en las mejores perfumerías del país.