Hay novelas que deberían ser de imprescindible lectura y ‘El mundo según Garp’, de John Irving, es una de ellas. Tengo que reconocer que, sin la recomendación de mi librero no habría llegado hasta ella nunca, las cosas como son. Pero ¡cómo se agradecen estas recomendaciones y regalos literarios! ¿Os acordáis de la película ‘Las normas de la casa de la sidra’? Pues os diré que el autor del libro en el que se basa la película (y guionista de la misma) debe estar acostumbrado a firmar obras maestras. Una maravilla. ‘El mundo según Garp’ es una novela arrolladora (con más de setecientas páginas) que noqueay deja inválido al lector cuando la termina.
Portada 'El mundo según Garp'
«En este mundo de cochina mentalidad, pensó, eres la esposa de alguien o la puta de alguien; o vas camino de convertirte en una de las dos cosas. Si no encajas en ninguna de las dos categorías, todo el mundo trata de hacerte creer que algo te pasa. Pero, pensó, a mí no me pasa nada.» (...) «Comprendió lo que pensaban: si ha de ser puta, al menos que vaya limpia y bien calzada.»
Desde que es concebido, Garp es una persona muy especial. Su madre es Jenny Fields, una mujer que se convierte en pionera, líder y símbolo del movimiento feminista en Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial. Su infancia y el mundo que le rodea hacen que Garp forje una personalidad muy peculiar, en la que no habrá filtros ni juicios de valor, aunque sí muchos miedos que se reflejan en su personalidad durante toda la trama.
Hablar del argumento de 'El mundo según Garp' es imposible porque es una historia de vida, la de un chico sin padre que anhela ser escritor y formar una familia. Es una novela en la que ocurren muchas cosas y muy sorprendentes, una novela por la que pasan muchos personajes, tan singulares como tiernos e increíbles.
No hay que tener prisa por terminar 'El mundo según Garp'. Es una lectura que se debería degustar en pequeños sorbos, cada uno de ellos es tan intenso que hay que digerirlo muy bien.
John Irving es un autor para leer y reposar. Para disfrutar y no escatimar. Ha sido mi primera incursión en su literatura y me atrevo a decir que no le sobra ni una coma. Su mundo tiene protagonistas y situaciones surrealistas, pero está tan, TAN, bien contado, que hay que pedir más. Sobre mis estanterías ya reposan 'Las normas de la casa de la sidra' y 'Una mujer difícil'. Es pensarlo y "me froto las manos".
Valoración Goodreads: ⭐⭐⭐⭐⭐