Revista Cultura y Ocio

El navío San Agustín en la batalla de Trafalgar ( estudio)

Publicado el 25 agosto 2017 por Jblor8

La combatividad del navío fue documentada por testimonios de diferentes oficiales. Estos deben ponderarse por las circunstancias propias de una acción de combate en donde la atención de cada oficial está focalizada al cumplimiento de su deber.

Así, el parte del teniente de navío D Jose Valdés, refiere el comienzo del combate a las 12 que trascurrió con mayor actividad hasta las 1500. A esa hora comenzó a batir un navío de tres puentes de los dos que atacaban al Santísima Trinidad. Rendido este, dirigieron su fuego contra el San Agustín, uno por babor y otro por estribor. Al que se sumó otro navío de 80 cañones que empezó a batir de costado, resultando herido, fue retirado a la enfermería.

El informe del teniente de fragata D. Vicente de Lama, verifica el ataque de dos navíos de tres puentes, aunque al no abandonar su puesto de combate no pudo aportar más datos.

La carta del alférez de fragata D. Joaquin Bocalán a D Francisco de Hoyos, corrobora el combate del San Agustín contra cinco navíos, dos de ellos de tres puentes.

En los momentos finales del combate entre las flotas, cuando el silencio y la calma cayeron sobre una atmósfera oscura de navíos devastados, D. Joaquin Arce, ayudante del mayor general Gravina, comunicó oír fuego..allá,en la lejanía, a barlovento. Eran cañonazos del San Agustín todavía defendiendo su insignia.

Se repelieron dos intentos de abordaje hasta que a las 17:30, solamente quedaba gente en las baterías sin poder oponer resistencia a un tercero. Consumado, embarcaron más de 150 ingleses con dos oficiales y un guardia marina.

El estado del buque en el momento de su rendición presentaba desarbolamiento del palo de mesana, agujereados el palo mayor, trinquete y bauprés, así como múltiples cañonazos a flor del navío que producían vías de agua que lo hacían ingobernable.

El general Collingwood envió una falúa con un capitán de navío a . Fue trasladado al navío , otros informes, sin embargo, apuntan a que lo fue al navío Orión. Desembarcó en Gibraltar en donde le fueron tributadas las mayores pruebas de respeto y consideración. Regresó a Cádiz el 11 de noviembre.

VI. Proyección histórica.

¿Qué ha trascendido de todo ello? No mucho. Hay gestas épicas de valor y sacrificio conocidas por todos. Pero tambien hay estampas de épica e ímpetus que yacen en el olvido porque como dijo Montaigne, pura obra de la fortuna es hacer que los actos sean conocidos y vistos.

Quizás el laconismo de la prensa decimonónica hacia una batalla tan vasta, imposible de plasmarla en las pocas páginas de un diario. O quizás una prensa supeditada a la excelencia de narrativas que focalizaron su trama en acciones de guerra concretas.

Ello nos obliga a reflexionar si la literatura puede condicionar de algún modo la historia. Es una pregunta que ha motivado mucha controversia durante siglos.

VII. El hombre y su navío.

Navegó en 1772 en el jabeque Pilar y en 1777 en la fragata Rosario. En 1778 fue destinado al navío San Pedro, en 1780 sirvió en los navíos Arrogante y San Luis. En 1783 embarcó en los navíos Dragón y San Leandro, en la urca Librada y en la fragata Clara. En 1784 trasbordó a la fragata Matilde y a la urca Espaciosa. En 1787 fue destinado al navío San Sebastian, a la urca Santa Rita, al navío Conde de Regla y a la fragata Guadalupe. En 1788 trasbordó al Real Carlos. En 1790 fue embarcado en el navío Mexicano y en 1793 en el Santa Isabel. En 1794 comandó el San José, en 1795 el navío de línea Neptuno. En 1803 toma el mando del Príncipe de Asturias y en 1804 el del navío San Julián, fragatas Pilar, Esmeralda y Diana. En 1805 comandóel navíoSan Agustín en Trafalgar en las circunstancias expuestas en este estudio .

El San Agustín fue construido en el Real astillero de Guarnizo siguiendo las directrices del ingeniero Gautier. Fue botado el 9 de diciembre de 1768 con cierto retraso debido al corte de la madera siguiendo el método inglés.

Se armó siguiendo el plano del San Juan de Nepomuceno. Ambas embarcaciones fueron aligeradas de peso de sus costados en las carenas dando una escora más baja y por ello otorgándoles más estabilidad y suavidad en los balances, como escribe Fernandez de Landa. Además, se cortaron los palos por sufrir un importante defecto de aguante en la vela. Se compensó, disminuyendo las dimensiones verticales (palos, masteleros y juanetes) e incrementando las dimensiones horizontales de las vergas, principalmente las de gavia y velacho.

Fuera a pique tras el temporal que azotó a gran parte de los navíos después de la batalla, fuera incendiado por el Leviathan, el San Agustín desapareció en algún lugar del Atlántico, no muy lejos de cabo Trafalgar el día 29 de octubre.

No sin razón, la prensa del s. XIX, llamó a esta batalla, la gloriosa derrota de Trafalgar. El San Agustín, conforme a sus hechos, contribuyó a forjar leyendas y referentes para una historia de la Armada que es fundamento intangible de su futuro.

[1]Ferrer de Couto, J. (1851) Combate naval de Trafalgar. Madrid: Imprenta de D. Wenceslao Ayguals,125, nota 4 que remite a Grima. Relación de Trafalgar. Ms. y Reflexiones militares sobre el combate de Trafalgar. Ms. anónimo.

La razón de esta decisión es posible que obedeciera a la voluntad de Napoleón de sustituir a Villeneuve por el almirante Rosily dada su "[...]excesiva pusilanimidad [...]". Critica recogida en una carta firmada por el emperador el 15 de septiembre de 1805 en referencia al combate de Finisterre.

[2] Ferrer de Couto, J. (1851) Combate naval de Trafalgar, cit, 125 y ss.; González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. I. Madrid: Ministerio de Defensa, 114 y De Marliani, M. (1850) Combate de Trafalgar: Vindicación de la armada española contra las aserciones injuriosas vertidas por Mr. Thiers en su Historia del consulado y el imperio. Madrid, 352-3.

[3] Ferrer de Couto, J. (1851) Combate naval de Trafalgar. Cit., 126-7.

"[...]Las fuerzas aliadas ascendían a un total de 33 navíos, cuatro de tres puentes, cinco fragatas y dos bergantines. Las inglesas no superaban veinte y siete navíos, siete de tres puentes, cuatro fragatas, una goleta y una balandra de escaso porte [...]"- Parte del mayor general D. Antonio de Escaño al príncipe de la Paz, fecho en Cádiz a 17 de diciembre de 1805, en Thiers, A. (1846) Historia del Consulado y del Imperio: continuación de la Historia de la Revolución Francesa. I. trad. Pérez Comoto, J.. Madrid: F.P. Mellado y De Marliani, M. (1850) Combate de Trafalgar: Vindicación de la armada española contra las aserciones injuriosas vertidas por Mr. Thiers en su Historia del consulado y el imperio, cit..

[4]Táctica diseñada, en 1697 por el jesuita y matemático P. Paul Hoste. Era empleada por todas las potencias navales. Es descrita en la obra: Hoste, P. (1697) L' art des Armees Navales, ou Traite des Evolutions Navales. Lyon: Anisson& Posuel.

[5] Dumas, Guillaume-Mathieu, XIII, 177 citado en: De Marliani, M. (1850) Combate de Trafalgar. Vindicación de la armada española, cit., 392.

[6]Similar a la empleada siglos atrás por Roger de Lauria: formación en líneas oblicuas, que por aquel entonces recibían el nombre de escala, véase Ferrer de Couto, J. (1851) Combate naval de Trafalgar. cit.,132, nota 2 con remisión a Archivo de la corona de Aragón, Colección diplomática del reinado de D. Pedro III; Deposito hidrográfico. Colección de documentos de Marina y Quintana Lorenzo, M. (1807) Vida de los españoles celebres.

[7] Naval & Military Press (2008) Ensayo sobre táctica naval, sistemática e historia, 1804 [en línea] disponible en "http://www.naval-military-press.com/essay-on-naval-tactics-systematical-and-historical-1804.html" [consulta: 27 abril 2017].

La circunstancia de ser publicada en 1804 no impidió su conocimiento por la oficialidad inglesa. Fue empleado George B. Rodney en el combate naval de Santos, durante la campaña de las Antillas en 1782. También por Richard Howe en la batalla del Glorioso 1º de Junio, en 1794 y por Adam Duncan en Camperdown, en 1797, vid. González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. I, cit., 111.

Concurren muchas tácticas de distintos autores que suponen alternativas a la formación clásica en línea. Frente a esta teoría ortodoxa y de obligado cumplimiento según las ordenanzas de las distintas potencias, surge otra: la escuela melenista (del francés "mêlée": revuelta). Proponía romper la línea dando a los comandantes libertad para atacar masivamente.

Los melenistas no consideraban esencial tener el barlovento, también lograr la concentración de la escuadra para evolucionar y alcanzar una táctica ventajosa, vid. Albert Ferrero, J. (2005) La táctica naval en la época de trafalgar. Revista General de la Marina, 249 (8-9), 219 y ss..

Para Enrique McDonnell la táctica empleada por Nelson es similar a la mencionada en el ataque 14º del Tratado de señales de día y noche, e hipótesis de ataques y defensas dispuesto por el Estado Mayor de Marina para auxiliar la instrucción de este ramo (1804). Madrid: Imprenta Real.

Es un tema que, en cualquier caso, invita a profundos debates por la diversidad de fuentes que concurren.

[8] The National Archives (2017) Batlle of Trafalgar [en línea] disponible en "http://www.nationalarchives.gov.uk/nelson/gallery7/trafalgar.htm " [consulta: 15 mayo 2017].

Véase: Bennett, Geofrey (2014) The battle of Trafalgar. London: Endeavour Press Ltd..

[9] Muchos estiman que este error táctico propicio la derrota de la combinada, vid. Ferrer de Couto, J. (1851) Combate naval de Trafalgar. Madrid: cit, 134 y González-Aller, J.I. (2004). La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. I, cit.,141.

Ese instante de las 7 de la mañana es recogido tambien por el general Escaño en carta remitida al ministro de Marina, vid. Diario "La Nación" de 28 de febrero de 1850 [en línea] disponible en "http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0026578884&page=3&search=trafalgar+jado+y+cajigal&lang=es " [consulta 28 mayo 2017].

Nelson ordenó atacar a la combinada a las 6 de la mañana, pero los vientos no fueron favorables. La orden de ataque definitiva fue dada a las 11:48. vid. The National Archives (2017) Batlle of Trafalgar [en línea] disponible en " http://www.nationalarchives.gov.uk/nelson/gallery7/trafalgar.htm" [Consulta: 19 mayo 2017].

[10] Los nombres de los comandantes de la flota inglesa pueden verse en Diario "La época", de 21 de octubre de 1905, [en línea] disponible en "http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0000721002&page=7&search=trafalgar+jado+y+cajigal&lang=es" [Consulta: 21 mayo 2017].

[11] Girar el buque, llevando la proa desde sotavento a barlovento o disminuyendo el ángulo que por dicha parte forma la dirección de la quilla con la del viento, vid.Diccionario marítimo español (1831). Madrid: Imprenta Real, 393.

[12] González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805) Corpus documental. I, cit., 117 e Iñigo Fernández, L.E. (2014) Breve Historia de la Batalla de Trafalgar. Madrid: Nowtilius.

[13] Nombre o indicación de la dirección media entre la de la quilla por la parte de proa y la de través, Diccionario marítimo español. (1831), cit., 32.

[14] Navío que antecede y el que sigue inmediatamente a otro en una línea o columna, vid. Diccionario marítimo español (1831), cit, 364.

[15] Olaizola, J.L. (2004) De Numancia a Trafalgar. Victorias y derrotas de nuestra historia. Madrid: Temas de hoy, 210.

[16] González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. II, cit., 1171.

[17] Vid. González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. I, cit., 123.

[18] Iñigo Fernández, L.E. (2014). Breve historia de Trafalgar. Madrid: Nowtibus SL.

[19] Confróntese los mapas de operaciones documentados en González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. II, cit., 1696.

[20] Bennett, Geofrey (2014): The battle of Trafalgar. London: Endeavour Press Ltd..

[21] El artillado de las naves estaba regulado en el Reglamento de 5 de agosto de 1752, vid. García-Torralba Pérez, E. (2016) Navíos de la Real Armada, Madrid: Fondo Editorial de Ingeniería Naval y Colegio Oficial de Ingenieros Navales y Oceánicos de España, 302.

[22]Semanal "El archivo militar", de 14 de febrero de 1850, núm. 47, 2ª época, 1 y 2.

Vid. González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. II, cit., pp. 1195-6 con remisión a Ferrer de Couto, J. (1851) Combate naval de Trafalgar, cit, 163 y De Marliani, M. (1850) Combate de Trafalgar: Vindicación de la armada española contra las aserciones injuriosas vertidas por Mr. Thiers en su Historia del consulado y el imperio, cit., 327 y ss.

[23] González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. II, cit., 1196-7.

[24] García-Torralba Pérez, E. (2016) Navíos de la Real Armada, cit., 512.

[25] Von Clausewitz, C. (2005): De la guerra, Madrid: La esfera de los libros, 147.

[26] Documentada en la carta enviada por D Joaquin Bocalán a D. Francisco de Hoyos con relación de los sucesos acaecidos a bordo del navío San Agustín, en donde había estado embarcado como alférez de fragata, González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. II, cit., 1516.

[27] González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. II, cit., 1516.

[29] Montaigne, M. de (2008) Ensayos. Estella: Catedra, 620.

[30] Mainer, J.C (2008) La literatura como historia, historia como literatura. Revista de pensamiento contemporáneo, (26), 83-92.

[31] Certificación del archivo diocesano de Santander, signatura 1.324, de fechas 1695 a 1743, folio 101.

[32] Orden creada por SMC Fernando VII el 10 de julio de 1815.

[33] González-Aller, J.I. (2004) La Campaña de Trafalgar (1804-1805). Corpus documental. II, cit., 1614.

[34]Márquez Carmona, L. (2003) Naufragios de la batalla de Trafalgar y el puerto de Santa Maria. Revista de Historia de El Puerto, Aula de Historia "Menesteo", p. 14.

[35]García Torralba Pérez, E. (2016) Navíos de la Real Armada 1700-1860, cit. 332 y AGM 3804.

[36] Quemado por el Leviathan recoge el periódico "Mercurio de España" de 31 de diciembre de 1805, que reproduce una carta de almirante británico Collingwood, p. 441.

[37] Diario "La Esperanza", de 8 de febrero de 1861, p. 3 y Diario "La Correspondencia de España", de 17 de agosto de 1861.


Volver a la Portada de Logo Paperblog