Mucho derrotista suelto. Que si somos el culo del mundo, que si nuestra riqueza, ¡qué ironía!, se basa en el turismo y que eso se debe a nuestro clima y nuestra situación geográfica. Que si no tenemos industria, que si sólo tenemos servicios. Pues que sepan que se equivocan.
Este país, además del turismo y la construcción, es un líder también en la venta de armas. Somos según el SIPRI, los octavos exportación de armas del mundo, entre 2005 y 2009. Si contamos sólo el 2009, llegamos al sexto lugar. ¡Toma ya! ¡Hay quien dé más!
Somos el número veintiséis en educación, alrededor del veinte en PIB por habitante y en venta de productos industriales ni se sabe. Ahora bien, en armas somos la leche, sólo por detrás de USA, Rusia, Alemania, Francia, Reino Unido, Holanda e Italia. Vamos, la flor y nata del primer mundo. Ahí estamos nosotros.
Y es que hay que reconocer que con Zapatero se han hecho grandes progresos. Y no, no es coña, ni me voy a referir al número de parados. Solamente baste decir que hemos pasado del puesto dieciséis, en tiempos de Aznar, al ocho.
Como tiene que ser, como mandan los cánones comerciales, hay que vender sin mirar ni qué ni a quién. Armas, pues armas; a países en conflicto, pues eso, ¿acaso no pagan? Escrúpulos, eso es lo que hay que evitar. Y qué más da si se envía a sitios donde hay guerras. Mejor, al menos sabemos que allí se utilizarán y sabrán de la calidad de nuestra maravillosa industria. ¿Qué país mejor que Israel para que puedan apreciar nuestra calidad de producto? Y si no Sri Lanka.
O sea que ya saben. Y desde que están los socialistas más y mejor. Para que luego digan. Money is money, en este caso bloody money.
Salud y República