El ocaso de la gestión de Recursos Humanos; Liderazgo, talento, coaching y otros despropósitos

Estimad@s amig@s
Sinopsis Este libro habla de empresas, de cómo se organizan, de los conceptos establecidos que influyen en su funcionamiento más o menos renqueante, de los principios que regulan su actividad y de las decisiones en torno a las personas que las habitan. Nada nuevo ¿no?... Pues sí. La novedad está en su contenido, temerario quizá, pero bien cimentado en años de trabajo; en el modo chispeante y cautivador en que está escrito y, sobre todo, en la intención que lo alienta: propiciar una mirada renovada sobre el comportamiento humano en las organizaciones. Conceptos como lenguaje, comunicación, responsabilidad, liderazgo, talento y formación, son palabras siempre sometidas a dolorosas torturas y manipulaciones, y el libro nos abre nuevas perspectivas al sumarles otras tantas palabras algo más inspiradoras y refrescantes. Incluye, además, cerca de un centenar de ejercicios de ese aprendizaje asociados a cada uno de los temas abordados. ¿Es lo mismo el talento que la valía?, ¿Sale el liderazgo indemne cuando resurge de la experiencia un concepto nuevo como el liderarismo?; ¿Quedan las responsabilidades maniatadas bajo el yugo de los puestos?, La comunicación, ¿no suele quedar reducida a un mero ripio informativo? ¿Cuáles son las consecuencias del predominio de tanto concepto altisonante, y qué secuelas padecen estos cuando pisan la realidad del suelo organizacional?
«Yo quise aprender a ser valioso, pero sólo conseguí ser molesto»
Prefacio (…) se puede trabajar mejor si entendemos de una vez por todas que el liderazgo genuino se ejerce encumbrando al liderado, no al líder, que el talento es una capacidad que ostentan casi en cien por cien de las personas que integran una organización y que no debe de confundirse con valía, utilidad, lealtad, parentesco ni pusilanimidad (…)
«No es fácil de aceptar que cuanto más aprendes menos sabes»
El ocaso de la gestión…  es un título sugerente para una obra que te provocará incomodidad, de hecho creo que ese es uno de los objetivos que  Pello  Yaben persigue y para muestra un botón con el que me identifico «quise ser legionario de las organizaciones y me he convertido en un alborotador».
Es un libro bien escrito, que desmitifica a los líderes y apuesta por los liderados, que utiliza un léxico rico (desgraciadamente no es muy usual). Todo manual que provoca hacerte preguntas, reflexionar, buscar soluciones, merece su lectura.
«El silencio nos habla de una empresa abandonada; y su abuso, el ruido, vaticina lo peor»
(…) ¿Con que espíritu te mantienes en una organización cuando te percatas de que todos los nobles conceptos que nos inspiran a construir una sociedad mejor y más justa [valores, liderazgo talento (…)] son sólo argucias para esconder los más mezquinos intereses que has descubierto acumulando pequeños detalles y pruebas que al sumarlas el tamaño del engaño abruma? (…)
(…) quise ser legionario de las organizaciones y me he convertido en un alborotador. Creí estar preparándome para gobernar, y mis lecciones me han abocado al exilio (…) no he perdido la capacidad de sorprenderme, de soñar con algo mejor e intentar hacerlo realidad.
(…) aprender de otros, aprender de lo que acontece, adquirir habilidades en el día a día a puro apego al aprendizaje espontaneo, ganarse un lugar en el saber y el quehacer de la empresa está muchas veces en manos de algunos empleados que la empresa no merece la pena tener (…)
El fracaso de las organizaciones no está tanto en el incumplimiento del resultado de un plan sino en no definir siquiera el plan (…)
«Lo inesperado no se atrapa a golpe de procedimiento»
(…) si hablas de liderazgo se te tiene en cuenta y te da licencia para que se te tome en serio. Pero si en vez de liderazgo, hablas de liderado, todos te responden aturdidos ¿lidequé? (…)
(...) no hay una sola teoría sobre el liderado, ninguna formación centrada en aprender a ser liderado y a liderarse (…)
(…) un liderazgo orientado a los liderados significa concentrarse en lo que necesitan quienes realmente sacarán las castañas del fuego (…) los virtuosos de una orquesta necesitan dirección, orientación, algunas pistas y mucho espacio para el virtuosismo (…)
En la formación puedes acabar sabiendo cosas y, sin embargo, no haber aprendido nada en absoluto. Su objetivo es saber para hacer, su objetivo no es aprender, de modo que éste se convierte a veces n un mal necesario (…)
(…) aprendí más cuando menos lo esperaba, aprendí lo que no esperaba, aprendí lo que no debía, también aprendí lo esperado, lo ansiado, lo necesitado.
Experiencias de aprendizaje
1.   No siempre sabe uno cuándo va a aprender,
2.   El aprendizaje es un animal inquieto,
3.   A veces no basta con ser inquieto,
4.   En el aprendizaje hay mucho de construcción propia,
5.   El aprendizaje es un fan de los escenarios inciertos,
6.   (…) el silencio,
7.   La formación requiere atención, disciplina y retención,
8.   El aprendizaje es un impulso de dentro afuera,
9.   La formación trae a tu mundo un conocimiento domesticado,
«Si el orgulloso supiese lo ridículo que aparece ante quien le conoce, por orgullo sería humilde» Mariano Aguilo
El ocaso de la gestión de Recursos Humanos Liderazgo, talento, coaching y otros despropósitos Pello Yaben Solchaga Almuzara
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«La ley es poderosa, pero más poderosa es la necesidad»  Johann W. Goethe
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