El océano al final del camino - Neil Gaiman

El océano al final del camino

Título original: The Ocean at the End of the Lane
Autor: Neil Gaiman
Fecha publicación: 10/2013
Editorial: Roca EditorialPáginas: 240
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El océano al final del camino es una novela sobre la validez de los recuerdos, la magia y la supervivencia; sobre el poder de la imaginación y la oscuridad que hay dentro de cada uno de nosotros.
Un hombre vuelve a la zona donde vivió hace cuarenta años para asistir a un funeral. En un arranque incomprensible e inesperado, decide acercarse a la casa de su amiga de la infancia, Lettie. Y es ahí donde los recuerdos que no sabía que tenía empiezan a fluir, como el océano que Lettie insistía que era, en realidad, su estanque. La memoria se mezcla con la fantasía mientras el protagonista nos cuenta un viaje imposible, en un mundo que puede o no existir, repleto de monstruos imaginarios que se hacen reales en el relato de ese niño de siete años. Tan reales como los monstruos que los adultos sí podemos entender y temer, y ante los que la única defensa con la que cuenta el niño son las tres extravagantes mujeres que viven al final del camino.

Después de mucho tiempo queriendo leer algo de Neil Gaiman, este ha sido por fin el primer libro suyo que leo y no me ha defraudado para nada.

Neil Gaiman

El océano al final del camino comienza cuando su protagonista, un narrador sin nombre, debe regresar a casa de su hermana tras la muerte de un familiar. La idea de ir allí se le hace muy dura simplemente por la idea de tener que afrontar las condolencias y preguntas de gente que no ha visto en años. Así pues, casi sin ser consciente de ello, se dirige hacia la zona donde vivió durante su infancia. Siguiendo la carretera que pasa por su antigua casa, donde más adelante termina convertida en un pequeño camino de graba, llega finalmente a la pequeña granja Hempstock. Y es entonces cuando comienza a recordar
Poco a poco comienza a recordar su infancia y cómo llegó por primera vez a aquella granja. Fue cuando tenía siete años y el inquilino que alquiló una de las habitaciones de su casa se suicidó, su padre lo envió a la granja con las mujeres Hempstock mientras la policía investigaba. Allí descubre a estas extrañas mujeres que para su sorpresa, parecen saberlo todo acerca del incidente sin haber estado presentes. Algo muy antiguo y de otro mundo ha despertado accidentalmente y deberán ponerle solución.

“Vivía en los libros más que en cualquier otra parte.”

El libro logra tocar la fibra sensible pues en sus primeros recuerdos descubres que éste es un niño que no termina de encajar con los demás y que no se siente muy feliz. Un niño que se siente más seguro rodeado de libros que de otras personas. Es realmente triste cuando en los primeros capítulos te explica que no vino ninguno de los niños invitados a su fiesta de cumpleaños. 

El océano al final del camino es como un cuento de hadas de nuestras propias vidas y de nuestras verdades más duras. Vivimos con este niño el miedo a enfrentarse a un monstruo que amenaza a su familia. También debe afrontar una realidad donde no todo es lo que parece y verdades tan aterradoras como descubrir que ser adulto no te convierte automáticamente en alguien maduro, responsable y sabio.

“Te voy a decir algo muy importante: por dentro, los adultos tampoco parecen adultos. Por fuera son grandes y desconsiderados y siempre parece que saben lo que hacen. Por dentro, siguen siendo exactamente igual que han sido siempre. Como cuando tenían tu edad. La verdad es que los adultos no existen. Ni uno solo, en todo el mundo.”

En poco más de 200 páginas encontramos un cuento de hadas, una historia de terror, aventuras, dramas familiares... Está claro que a veces no es necesario escribir largos libros para contar una historia intensa. El océano al final del camino es un libro encantador que me ha llenado de nostalgia y de recuerdos de la infancia. La trama me ha parecido muy ingeniosa y, sin duda, tengo la intención de leer muchos más libros de este autor.
El océano al final del camino creo que es un libro que disfrutará cualquiera aunque el género fantástico no sea uno de sus géneros favoritos porque es una historia que cuenta verdades, solo que disfrazadas con magia y fantasía. Os lo recomiendo, una historia bonita y que os hará reflexionar.