Revista Salud y Bienestar
Elvira es una paciente que siempre se despide regalándote un Kit-Kat.
-. Tome Ud. Dr!... Con mi agradecimiento!.
Mientras lo hacía hoy, me contó la anécdota que le ocurrió el otro día, cuando acompañando a su marido visitaron al oftalmólogo habitual...
Este, quien les esperaba en la puerta del despacho, les dijo mientras entraban: -. Y mi chocolatina?!... -. Ah no!... No Doctor, no! -le repuso Elvira- primero tiene Ud. que atender a mi marido!