El origen del Ojo de Fátima
Algunos lo llaman Hamsa y tiene un equivalente con forma de mano que lleva en la palma el ojo. Se cree que el origen de este amuleto se remonta al antiguo mundo árabe, donde su significado era el que se mantiene hasta la actualidad: la protección ante cualquier tipo de desgracias. Cada dedo de la mano simboliza un pilar de la región musulmana: la fe, la oración, la limosna, el ayuno y la peregrinación.
La aplicación del ojo en el centro de la mano fue incorporada para proteger a su dueño del mal de ojo. Tanto la mano como el ojo pueden encontrarse en la parte superior de las puertas de las viviendas. Antiguamente, la forma de los herrajes se asimilaba a la forma de la mano convirtiendo al amuleto en un elemento más de la casa.
El Ojo de Fátima en el resto del mundo
El uso de este símbolo se propagó a muchas regiones del mundo. En Estados Unidos se comenzó a utilizar incorporando la creencia de que este objeto protege las casas contra terremotos y desastres naturales.
Tal vez la aplicación más popular pueda verse en importantes organizaciones mundiales que trabajan promoviendo la paz en Oriente Medio. Estas instituciones integraron la mano (y en ocasiones el ojo) en su logotipo como referencia a las similitudes culturales entre musulmanes y judíos.
Dónde comprar el Ojo de Fátima
Dice la creencia popular que el ojo no puede comprarse para uso propio, sino que debe ser regalado. Sea cierto o no, el amuleto es uno de los objetos que aparece con más frecuencia en las tiendas del Gran Bazar de Estambul. Su presencia toma forma en objetos diversos, desde pulseras hasta remeras; aunque su representación más popular es el ojo de vidrio con una serie de ojos más pequeños adosados a una trenza de hilos. Esta trenza, incorporada en su parte superior, permite colgarlo facilmente de cualquier pared del interior del hogar o bien imitar la costumbre popular y colgarlo en la fachada de la vivienda.