Revista Maternidad
Parece ser que la tradición de comer huevos al finalizar el invierno es una reminiscencia de la Edad de Hielo. Tras el duro invierno, y cuando apenas quedaban provisiones, con la llegada de la primavera, volvían las aves desde el sur y empezaban a poner huevos, de los que se alimentaban los humanos hasta que podían volver a cazar con la llegada de mejores temperaturas
Para otras civilizaciones, principalmente las situadas en Egipto, Grecia, China, incluso en algunos lugares de américa, el huevo representaba fertilidad y vida. Cada vez que terminaba una dura época, se decoraban y se intercambiaban . El huevo se regalaba para recordar la llegada de fertilidad, vida y nacimiento.
En cuanto al conejo, sus orígenes no están muy definidos. Se supone que la elección de este animal se debe a su conocida capacidad de procreación, de gran valor simbólico en una temporada de fiestas dedicadas a la fertilidad de la tierra tras el invierno.
Para los fenicios, el conejo era un símbolo de la fertilidad asociado con la diosa Astarté , a quien además estaba dedicado el mes de abril . En alusión a esa diosa, en algunos países, a la festividad de Pascua se la denomina "Ostern " en países germánicos o "Easter" en los países anglosajones . Originalmente, era la festividad para honrar a la diosa teutónica de la luz y de la primavera, en los países anglosajones y germánicos.
Los pueblos antiguos del norte europeo, veían en la liebre un símbolo: sus fuertes patas traseras le permiten moverse siempre hacia arriba con facilidad, mientras que sus débiles patas delanteras le dificultan el descenso.
Posteriormente, la religión cristiana, queriendo poner fin a los ritos paganos eligió dicha festividad para celebrar la resurrección de cristo. Así, el conejo de pascua que tría los huevos decorados que representaban el símbolo de la vida y con los cuales se celebraban los días de abundancia, pasó a ser mensajero de cristo y los huevos, en lugar de ser consumidos en grandes fiestas, como era la costumbre, solo podían ser consumidos, tras los días de abstinencia de la cuaresma.
Una leyenda explica la existencia del conejo de pascua según la tradición cristiana:
Un conejo se quedó en el sepulcro de Jesús, y observó como había gente que lloraba por su muerte. Esto supuestamente afectó al animalito quien también se entristeció. El conejo se mantuvo cerca del cuerpo de Jesús y entendió que la persona que estaba allí debía ser muy importante y querida por las personas . Con el pasar de los días el conejo fue testigo de la resurrección y, al no poder hablar para comunicar la noticia, repartió huevos decorados que simbolizaban la vida y la alegría
Desde entonces, cuenta la leyenda, que el conejo sale cada Domingo de Pascua a dejar huevos de colores en todas las casas para recordarle al mundo que Jesús resucitó y hay que vivir alegres.
La tradición contaba que una coneja, iba saltando de casa en casa y se le iban cayendo los huevos que traía en su canasta, historia que aprovechaban los padres para esconder los huevos alrededor de la casa, o en escondites, para que los niños se entretuvieran buscándolos.
Con el paso del tiempo, los tradicionales huevos de ave, se han ido cambiando por elaboradas cestas con huevos de chocolate, aunque en muchos sitios ( en nuestra familia, por ejemplo ) , aún se sigue manteniendo la tradición de pintar huevos y esconderlos .
Fuentes: Wikipedia , Magiciencia