"El País" analiza la elección de Louzán y sus colaboradores

Dos de los más estrechos colaboradores de Rafael Louzán en la Diputación de Pontevedra compaginarán también puestos de responsabilidad en la Federación Gallega de Fútbol en una directiva integrada por diez personas, todas vinculadas en la actualidad de una u otra manera con el mundo del balompié excepto dos, Luis Serantes Álvarez, actual jefe de gabinete de la presidencia del ente provincial, y Amancio Varela García, responsable de nuevas tecnologías de la Diputación.
Louzán completa el nuevo once que regirá el fútbol gallego. Tampoco mantenía en la actualidad vínculo alguno con ningún club, pero se preocupó de recordar en la presentación de su directiva su pasado como jugador y presidente del Ribadumia y el trayecto realizado en los últimos meses para optar a un nuevo puesto de responsabilidad, invitado según apuntó por la petición de varios responsables de clubes gallegos. Uno de ellos, Gustavo Falque, presidente del Coruxo, de 2ª División B, ejercerá como vicepresidente primero. Él será uno de los hombres fuertes de la federación, sobre todo en aspectos futbolísticos porque los de gestión se reservan para Serantes, que ejercerá de tesorero, y Varela, que asume responsabilidades que tendrán que ver con la comunicación y las nuevas tecnologías.
 Serantes, que también es de Ribadumia y ejerce como secretario de organización del Partido Popular de Pontevedra desde hace dos años, ya acompañó a su presidente ésta misma semana a la clausura de un curso de monitores de fútbol base en Ames. Varela fue en su día el encargado de redactar el pliego de condiciones técnicas para que la Diputación de Pontevedra renovara más de 250 impresoras por un importe de casi un millón de euros que incluía suministro y mantenimiento durante cuatro años. Sólo se presentó un candidato a la contratación, que valoraba sobre todo una serie de condicionantes técnicos casi idénticos al catálogo comercial de la firma ganadora del concurso, con un único distribuidor en la provincia. “A la hora de redactar el pliego se coge una referencia”, argumentó entonces Varela.
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