NUEVA YORK (AP) – Las pelotas de béisbol realmente han tenido un impulso adicional desde 2015, y no se debe a los exagerados uppercuts que están tomando los bateadores, según un comité de 10 personas compuesto por investigadores contratados por la oficina del comisionado.
“Las propiedades aerodinámicas de la pelota han cambiado, lo que le permite llevar más lejos”, dijo el presidente del comité, Alan Nathan, profesor emérito de física en la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign.
Pero el panel, que incluye profesores especializados en física, ingeniería mecánica, estadística y matemáticas, se ponchó tratando de identificar la causa.
El informe de 84 páginas del comité fue publicado el jueves por Major League Baseball. No hubo evidencia de cambio significativo en el rebote de las bolas, formalmente llamado coeficiente de restitución (COR), o alteración en las oscilaciones de los bateadores, como uppercutting.
En cuanto a qué causó el cambio en las propiedades aerodinámicas, sigue siendo el gran misterio del béisbol, el equivalente deportivo de la búsqueda del Monstruo de Loch Ness.
“Tenemos que admitir y admitir que no lo entendemos. Sabemos que la causa principal es el cambio en el arrastre, pero simplemente no podemos precisar qué característica de la bola lo conduciría a eso”, dijo Nathan durante una conferencia telefónica. Miércoles antes del lanzamiento del informe. “Por lo tanto, probablemente fue algo muy, muy sutil en el proceso de fabricación, pero nuevamente tiene que ser bastante sutil, porque si no fuera así, lo habríamos encontrado”.
El físico Leonard Mlodinow, en un resumen ejecutivo que acompaña el informe, especuló que “los avances en la fabricación que resulten en una bola más esféricamente simétrica podrían tener el efecto secundario involuntario de reducir el arrastre de la bola”.
El promedio de jonrones por juego para ambos equipos en la liga mayor subió de 1.90 antes del receso del Juego de Estrellas 2015 a 2.17 en la segunda mitad, luego subió a 2.31 en 2016 y un récord de 2.51 la temporada pasada. El porcentaje de bolas bateadas que resultó en jonrones subió de 3.2 por ciento en 2014 a 3.8 por ciento en 2015 a 4.4 por ciento en 2016 y 4.8 por ciento en 2017.
“Encontramos una imagen consistente de que el coeficiente de arrastre es un poco más pequeño a medida que avanzamos a lo largo de 2015 en ’16 en ’17”, dijo Nathan. “Finalmente, utilizamos nuestra experiencia en física para concluir que el pequeño cambio que encontramos en el coeficiente de arrastre promedio durante todo el período 2015 a 2017 fue completamente consistente con el cambio en el número de jonrones por bola bateada.
“Entonces estás usando una física parcialmente pura, en parte un modelo, en parte datos estadísticos sobre distancias de home runs y cosas por el estilo, pero todo se mantuvo muy, muy bien. Así que las cuatro cosas apuntan al hecho de que es la aerodinámica propiedades de la pelota que han cambiado. Así que sabemos mucho de lo que hacemos, no sabemos … Bueno, lo que no sabemos es qué propiedad medible específica de la pelota ha llevado a este cambio “, dijo.
El comité inspeccionó la fábrica de Rawlings que fabrica las bolas en Turrialba, Costa Rica, analizó los datos de prueba de 2010-17 compilados por Rawlings y la Universidad de Massachusetts Lowell, que ha analizado las bolas para MLB. El grupo probó 15 docenas de pelotas sin usar de 2013-17 y 22 docenas de pelotas usadas entre 2012-17. El comité ideó nuevas pruebas realizadas en el estado de Washington y examinó datos MLB StatCast de 2015-17 que incluyeron el tipo de paso, la velocidad de salida, el ángulo de lanzamiento, el ángulo de aspersión, la velocidad de rotación, el eje de giro y la distancia.
MLB anunció cinco pasos en respuesta al informe:
-Monitor de la temperatura y la humedad de las áreas de almacenamiento de bolas en los 30 estadios de béisbol de este año y trabajará con el comité para determinar si ordena humidores a lo largo de las principales ligas en 2019;
-Actualizar las especificaciones de producción con Rawlings y agregar especificaciones para las propiedades aerodinámicas.
-Desarrollar pruebas aerodinámicas;
-Crear estándares para el roce de barro, para ser aplicado por los árbitros;
-Crear un consejo asesor científico.
Las bolas se han almacenado en un ambiente controlado por temperatura y humedad en Coors Field, una milla de Denver, desde 2002 y en el desierto en el Chase Field de Phoenix a partir de esta temporada.
Las bolas de estado oficiales de las reglas de béisbol deben tener 5-5¼ onzas y 9-9¼ pulgadas de circunferencia. Las pelotas de Grandes Ligas tienen pastillas de goma en el centro, enrolladas por tres capas de hilo que es 85 por ciento de lana y 15 por ciento sintético, y luego una fina capa de algodón. La cubierta de cuero de las vacas lecheras de Tennessee está cosida a mano con 108 puntadas.
“Rawlings hace las pelotas de béisbol con muchas, mucho, especificaciones mucho más estrictas de lo que están obligados a hacer por la propia especificación en sí”, dijo Nathan. “Así que recomendamos modificar eso y ajustar la especificación, y para que cuando diga que la pelota esté dentro de las especificaciones, tenga algún significado, y siguieron esa recomendación”.
No se examinó la aplicación del lodo de frotamiento de béisbol original Lena Blackburne, que proviene del lado de Nueva Jersey del río Delaware. El barro es utilizado por los asistentes de la casa club para hacer que las bolas sean menos resbaladizas.
“Podría haber algo de falta de uniformidad allí”, dijo Nathan. “Una de las cosas que se sabe que afectan el vuelo de la pelota, el acarreo de la pelota, es la aspereza de la superficie de la pelota. Por eso las costuras importan, pero también la parte de cuero, la parte blanca también importa”. , y las diferencias en la forma en que se aplica ese lodo podrían proporcionarle una pista “.
A Nathan le gustaría realizar pruebas adicionales sobre la rugosidad de la superficie y si las píldoras están descentradas.
“Hay algunas personas inteligentes que están investigando este negocio de arrastre, y la esperanza es que se descubra y comprendamos mejor las cosas”, dijo.
Además de Nathan, el comité incluía al profesor de estadística Bowling Green Jim Albert, los profesores de matemáticas del sur de California Jay Bartro y Larry Goldstein, el profesor Roger Blandford de la Facultad de Humanidades de Stanford, el profesor de matemáticas e ingeniería mecánica del MIT Anette (Peko) Hosoi, el profesor emérito de matemáticas Gary Gutden El profesor de ingeniería mecánica y de materiales del estado de Washington Lloyd Smith, Dan Brooks del sitio web Brooks Baseball y Southern Cal Ph.D. estudiante Josh Derenski.
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