Revista Cultura y Ocio
Desde hace algunas semanas estoy viviendo una experiencia completamente nueva para mí. Al autoeditar mis primeras novelas tuve que afrontarlo todo yo sólo, desde el exhaustivo proceso de corregir y pulir el texto hasta la promoción y difusión del libro pero, desde que firmé con Quorum Editores, algo está cambiando.Escribir es un acto íntimo. Un buen manuscrito es el resultado de muchas horas de soledad y es un gustazo ver a otras personas mimando y cuidando el texto en el que tanto tiempo he invertido. El equipo de Quorum Editores está tan interesado como yo en que mi nueva novela llegue a las librerías en las mejores condiciones posibles, y no me refiero sólo a la corrección ortotipográfica y de estilo, que también. Me refiero a todas aquellas sugerencias, apuntes y recomendaciones destinados a enriquecer el texto y pulir todos los detalles que pude pasar por alto en el momento de escribirlo.En ningún caso se trata de modificar el argumento, algo que por otro lado sería tremendamente arduo y costoso. Creo que una buena edición es el resultado del trabajo conjunto e indivisible de autor y editor, y esto sólo se consigue si ambos caminan en la misma dirección y hacia unos mismos objetivos.La buena disposición de mis editores en las primeras fases de este proyecto me llena de optimismo y me hace pensar en un futuro muy prometedor. Estoy seguro de que cuando tenga que pelear por la visibilidad de mi nueva novela no estaré sólo.