Decía la diputada del PP María del Pilar Sol en una comisión del Parlamento valenciano que ella sabía de parados perceptores de la ayuda de 400 euros que se gastaban el dinero en comprar televisores de plasma, no aportó prueba alguna de lo que dijo, pero lo largó y se quedó tan a gusto con lo dicho por muy vomitivo que fuera decirlo en el país que bate todos los récords olímpicos de desempleo de la eurozona en un paraíso de la corrupción institucional por lo que parece. Hay gente tan rara que es capaz de hacer sus funciones biológicas por el extremo opuesto de su cuerpo y en sede parlamentaria sin cortarse lo más mínimo.
Sin duda por eso el gobierno de España (el de Bárcenas) se ha esforzado a fondo para que la factura de la electricidad suponga para cada uno de ellos y sus familias como poco 100 euros cada mes, para que no se lo gasten en plasmas o en champán y caviar. No es un país tan disfuncional como disfuncionales son los que viven de él sin que las burradas o sandeces que dicen justifique que cobren ni el salario mínimo o la aún más mínima ayuda de 400 euros mensuales por familia independientemente del número de miembros. Suena repugnante porque lo es. Para eso Europa no está, ni se la espera, ella negocian de igual a igual con sus equivalentes que en el sur son los que son.
Pero para que se pudiera cumplir la profecía estaba el gerente-tesorero-senador, que después de cobrar como asesor 21.300 mensuales, puede que durante los dos últimos años o puede que durante las dos últimas décadas (y ya se sabe que no hay dos sin tres) fue dado de baja en la seguridad social como si hubiera causado baja voluntaria en su trabajo como asesor, pero sin avisarle de ello, al ver en la prensa las notas de pagos y repartos de mordidas, todo ello presunto como siempre en España con estos casos, a la espera de que los delitos de "las autoridades" prescriban para poder archivar los casos haciendo innecesario el consabido indulto al culpable en caso de que el corrupto sea condenado por la justicia a causa de un desgraciado pero reparable despiste judicial.
Pues el tal Bárcenas, el parado X millones ya está aquí, con millones de euros en cuentas opacas en paraísos fiscales, imputado por el juez que acabó expulsado por atreverse a apuntar que había lo que se está viendo que había en realidad en la trama de corrupción que osó investigar para su desgracia judicial. Dicen que si hay que indemnizarle con ese suculento salario por todos esos años tendrán que pagarle otro millón de euros del bolsillo de los ciudadanos, que es de donde sale el dinero que se fuma tan alegremente el partido, con lo que es normal que los datos de España vayan de malos a catastróficos para los ciudadanos y fantásticamente bien para ellos mismos y sus socios. Es lo lógico.Por fin se logró la profecía autocumplida al poner ellos mismos en circulación a un parado multimillonario en dinero negro, blanco y en propiedades de lujo. Por fin hay uno que puede el partido presentar al público demostrando que hay parados que no deberían constar como tales, lo han fabricado ellos mismos porque no encontraron a otro que cumpliera con la difamación de la diputada por las cortes valencianas, las mismas cuyos despropósitos dan hasta para un documental del la BBC en horario de máxima audiencia.Claro que cuando se les caiga el universo sobre sus cabezas y no sepan dónde meterse es posible que los ciudadanos digan de ellos lo mismo que berreaba en el Congreso sobre los parados la diputada del mismo partido y también ex senadora por la misma comunidad, la hija del genio del aeropuerto sin aviones de Castellón, un tal Fabra, tan famoso por sus decisiones como presidente de la diputación de la citada provincia levantina: que se jodan. Y esa otra profecía es la que ya no les hace tanta gracia. Los italianos tendrán a Pepito Grillo, pero los españoles tienen a Pinocho y todos sus clones gobernando. ¡Qué chusma!
