Marco Minniti se confia al pueblo del Partido Democratico en Milán, con ocasión de la fiesta nacional y pide a los militantes de rechazar la estrategia del miedo y de la indignación como medios para seguir en popularidad y seguridad impulsada por Salvini y Lega Nord.
Marco Minniti se introduce en el pabellón posicionado a lado de la Darsena, el lugar más sugestivo de Milán, cruce entre la movida y la periferia y el publico lo ovaciona, uno entre pocos que aún tienen apoyo en el Partido Democratico donde sigue la critica contra la clase dirigente constituida por Matteo Renzi y su gobierno al que también Minniti no se contiene en la critica, acusando el liderismo y el protagonismo de una parte de la izquierda.
El ex Ministro de Interior reivindica la linea politica de su gerencia de inmigración y seguridad en el país durante el gobierno Gentiloni y la segunda fase demasiado tardiva de la izquierda que suscribió acuerdos con Libia y Tunicia, empezó la cooperación con las Naciones Unidas por la protección internacional de los refugiados que vienen de Africa y impulsó el historico Tratado de Roma entre los clans principales de Lybia.
"Si siguemos con la politica de miedo y de expulsiones sin resolver juntos con Europa el problema de Africa y si pensamos ganar la aprobación del publico, buscando siempre un enemigo como este gobierno y su Ministro del Interior hacen cada día, debemos saber que no habrá libertad y democracia sin seguridad y no habrá seguridad solo con miedo, armas y puertas cerradas aunque el gobierno Conte no está consiguiendo ni expulsiones ni seguridad", así declaró el diputado del Partido.
Durante su encuentro Minniti criticó a Salvini por su falta de responsabilidad y respecto por las instituciones (referiendose a las critica del actual Ministro del Interior contra los jueces que lo acusan de secuestro de personas), pidendo de ser recordado ní como dirigente politico y ni siquiera como un ministro eficiente sino sólo como un hombre que logró servir a su país con honor y dignidad que no se compran con los votos, la aprobación del publico.
Al final Minniti pidió a sus compañeros de partido de dejar el protagonismo y el liderismo porqué "al pueblo de la izquierda no interesa lo que nos haremos o nuestra obsesión de volver lo más rápido posible al gobierno sino que nos rescatamos la confianza de la gente y volvemos a hablar de democracia y libertad juntos con la población que sienten el peligro de una perdida de ideas y de relación", alusión clara a Renzi que desde Florencia anunció su voluntad de permanecer al centro de las decisiones del partido.