Este jueves, el comisario mayor Mauricio Cassinelli, perito de la autopsia de Diego Armando Maradona, declaró ante el tribunal que, al momento de su fallecimiento, el reconocido futbolista presentaba un corazón con un tamaño superior al doble de lo normal, además de un «edema generalizado, de pies a cabeza» y señales de una agonía prolongada, que podría haberse extendido hasta doce horas.
Cassinelli, quien en ese entonces era director de Medicina Legal de la Superintendencia de la Policía Científica, detalló que Maradona tenía «cuatro litros y medio de agua acumulados en el cuerpo», de los cuales tres estaban en el abdomen.
El especialista explicó que la acumulación de agua no ocurre de manera rápida, sino que «es algo progresivo». Aunque no pudo determinar con exactitud el tiempo, indicó que este proceso habría tomado «al menos diez días».
En cuanto al corazón de Maradona, se identificó una “miocardiopatía dilatada”, una enfermedad del músculo cardíaco que provoca la expansión y el estiramiento de las cavidades del corazón.
No tenía un «corazón normal»
El perito especificó en su testimonio que el corazón de Maradona “pesaba el doble de un corazón normal” y que encontraron “coágulos cruóricos” que solo se forman cuando el paciente atraviesa un período de agonía.
Si bien no pudo determinar el tiempo exacto que duró la agonía del exfutbolista, dijo que «desde las 12:30 de la noche que no recibía controles, con lo cual dijimos que podía haber tenido una agonía de hasta doce horas».
El testigo basó su declaración en imágenes explícitas de la autopsia, las cuales fueron presentadas ante una sala llena.
«Todo grasa», dijo el perito, señalando el pulmón de Maradona, y luego mostró «riñones enfermos», con lo que definió como «signos de nefroangioesclerosis».
«También tenía una cirrosis hepática», dijo el perito exhibiendo una imagen del hígado.
Jana Maradona, quien este jueves regresó al juicio tras haber declarado el pasado martes, se retiró de la audiencia antes de que se exhibieran las imágenes explícitas de la autopsia de su padre.
La autopsia determinó que Maradona falleció el 25 de noviembre de 2020 debido a un «edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada».
El edema agudo de pulmón secundario es una emergencia médica que ocurre cuando se acumula líquido en los pulmones, lo que puede ser causado por insuficiencia cardíaca o daño en los pulmones.
A partir del examen forense, el perito estimó que la hora de su fallecimiento fue entre las 9 de la mañana y las 12 del mediodía.
La otra autopsia de Maradona
A solicitud de la defensa de los imputados, el perito Pablo Ferrari, experto oficial de la Corte Suprema de la provincia de Buenos Aires, realizó otro informe forense el año pasado que contradice el presentado este jueves.
En su informe, de 25 páginas, Ferrari sostuvo que Maradona no había recibido asistencia médica ni farmacológica relacionada con una patología coronaria, y estimó que el cuadro agónico se desarrolló “en minutos o, a lo sumo, en pocas horas”.
La Fiscalía de San Isidro cuestionó este documento, argumentando que el peritaje se llevó a cabo sin un equipo forense, en un plazo de 72 horas, y basándose en pruebas proporcionadas por la defensa del neurocirujano Leopoldo Luque, médico de cabecera de Maradona, quien habría preferido cuidados domiciliarios en lugar de hospitalizar al exfutbolista.
Entre los acusados también se encuentra la psiquiatra Agustina Cosachov, a quien se le imputa no haber administrado correctamente la medicación de Maradona, haberse desentendido de los efectos secundarios y falsificado un certificado relacionado con una visita al astro.
Asimismo, se encuentran en el banquillo el psicoanalista Carlos Díaz, la doctora y coordinadora de la empresa de salud privada Swiss Medical, Nancy Forlini, el médico clínico Pedro Di Spagna, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni y el enfermero Ricardo Almirón.
Petición negada al hijo del astro
El tribunal que juzga a siete imputados por la muerte de Maradona resolvió este jueves no apartar a las hermanas del ídolo de la querella del juicio, tal como había solicitado el abogado de Diego Junior, uno de los hijos de Maradona. El letrado argumentó que las hermanas se habían beneficiado de manera ilegítima de la marca comercial de Maradona.
«El tribunal por unanimidad decide que no corresponde separar a las hermanas de la causa», expresó el tribunal compuesto por los jueces Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach.
La solicitud había sido realizada por Eduardo Ramírez, abogado de Diego Junior, después de que se conociera que Rita y Claudia Maradona, hermanas del ídolo, serían citadas a indagatoria en una causa paralela vinculada al uso, control y usufructo de la marca comercial de Maradona.
«Ya no se trata de particulares damnificadas, sino de particulares beneficiadas», argumentó Ramírez y mencionó que las hermanas estaban involucradas en la cesión de marca y sospechadas de defraudación, «en perjuicio del resto de los damnificados».
Sin embargo, los jueces decidieron no hacer lugar a la petición, apoyándose en el derecho de acceso a la información previsto para los familiares de las víctimas.
Fuente: EFE.