El PIB catalán crecerá el 1,1% este año y el 1,6% el siguiente

El PIB catalán cerrará este año con un incremento del PIB de un 1,1% y del 1,6% el próximo ejercicio según el Informe de Situación y Perspectivas de la economía catalana que realiza periódicamente el servicio de estudios de CatalunyaCaixa, coordinado por el catedrático Josep Oliver.
Estos datos mejoran la previsión del pasado enero donde se auguraba un incremento en 2011 de tan sólo el 0,7%. El aumento, explica Oliver, se debe a varios factores: a un mejor y excelente comportamiento de las exportaciones industriales que ya han superado su máximo histórico en el primer trimestre de este año (de 13.000 millones de euros) lo que permite, de paso, recuperar una parte del saldo exterior de la balanza de bienes y servicios; a la mejoría del sector turístico catalán hasta el punto que 2011 puede volver a ser un año récord tanto en número de turistas (con más de 16,5 millones) como en pernoctaciones (48 millones); y a un mejor comportamiento de la inversión productiva, más débil en 2011 que en 2012. La formación bruta de capital fijo en bienes de equipo este año aumentará sólo tres décimas pero en 2012 crecerá 3,4 puntos.
Después que el sector público abandone su política de consolidación fiscal (en 2013) empezará a sumar, aproximadamente un punto, con lo que la previsión de Oliver es que en 2014 este país pueda estar creciendo ya en torno al 3%.
Todo ello en un contexto donde tendrá continuidad la debilidad de la demanda interna ya que la renda disponible de las familias experimentará mínimos avances (0,5%) con pérdidas reales de poder adquisitivo por el incremento de la inflación que se prevé sea del 3% a finales de 2011.
Con estos mimbres el informe establece que la tasa de desempleo no vaya menguando significativamente (su máximo, del 17,9%, se producirá este año). No se espera una creación de ocupación neta hasta finales de 2012. Oliver estima que los 450.000 puestos de trabajo destruidos en Cataluña no se recuperarán hasta 2017, prácticamente una década después de haber comenzado la crisis.
Con estas previsiones la economía catalana (el 20% aproximadamente del PIB nacional) se constituye en la locomotora de la recuperación de la economía española. Las exportaciones catalanas y valencianas superan el 45% del total español.
Oliver establece sus previsiones en un marco donde no se produzcan cataclismos económicos. El mayor peligro para este escenario, según su criterio, proviene de la deuda soberana de la zona Euro. Sin embargo, considera que la UE ha decidido que el euro debe sobrevivir y, por lo tanto, se encontrará la solución.
No descarta que haya otro susto para España (aumento de la prima de riesgo) pero que se irá reduciendo después que se haya concretado el segundo plan de rescate a Grecia. La deuda griega que está aún en manos privadas pasará a instancias públicas y, en ese contexto, se podrá plantear moratorias o quitas ordenadas.