El poder de Facebook

¿Qué joven de entre 14 y 30 años no participa en una red social? Son muy pocos los aventureros que prefieren seguir viviendo sin estar pegados a la tecnología. Que bien que hacen. Hoy, más de la mitad de los adolescentes (y no tanto) incursionan en las llamadas redes sociales. El caso ejemplar es Facebook ¿Por qué?Algunos apelan a su curiosidad, "lo uso para ver como es y de qué se trata". Otros, en cambio, directamente lo utilizan como espacio para compartir su vida íntima: suben cientos de fotos y videos, las intercambian con amigos y conocidos y hacen comentarios al respecto. Hay quienes van más allá y quieren hacerse cientos de nuevos contactos o amistades virtuales; incluso apelan a conocer algún día a su amigo facebookero. En los últimos meses Facebook cobró un nuevo rol. La participación masiva. Se estima que solamente en Argentina más de seis millones de personas tiene su perfil en esta red. Entonces, visionarios de la comunicación vieron en esta red social una vía de contacto directo entre los grandes medios de comunicación y el público. Una especie de buzón de lectores gigante y sin censura. Por ello, cientos de programas televisivos y radiales, como así también diarios digitales y blogs abrieron su espacio en Facebook para crear una relación con la audiencia. Hay varios ejemplos interesantes para destacar.678, controvertido programa de la televisión gubernamental, se hizo eco la oportunidad que brinda Facebook y creó su perfil. La respuesta fue inmediata. Fans y seguidores del programa comenzaron a interactuar entre sí y entre los conductores del programa. Como resultado se convocaron varias marchas con asistencia calculada en cinco mil personas en apoyo del gobierno nacional.Un Mundo Perfecto, conducido por Roberto Pettinato es otro caso en el que el medio interpela directamente a la audiencia. Consignas, juegos, chistes o directamente algún mensaje que el conductor lee en una sección del programa.Facebook se instaló en la sociedad. Fotos, videos, aplicaciones (juegos, tarot, etc), creación de eventos como fiestas o encuentros son las principales funciones que posee esta red social y que, de a poco va sumando adeptos. Lo realmente interesante es el poder de convocatoria. Por ejemplo, se crean los llamados grupos y a los dos o tres días ya tiene varios fans que interactuan entre sí. Sin embargo, hay quienes aprovechan estos espacios para difamar o agredir a personas, instituciones, figuras públicas, etc. Se han conocido casos de grupos y seguidores dispuestos a odiar a otra persona. La gran rateada es el último caso que puso a Facebook sobre el tapete y en boca de todos. Miles de alumnos de distintas escuelas del país se convocan a faltar un día de clases y reunirse en un lugar público para conocerse y pasar el día. Padres y autoridades, es decir adultos que no están involucrados con Facebook (y muchos no entienden verdaderamente qué es y para qué sirve), saltaron a frenar dicha convocatoria. El hecho tomó tanta relevancia que hasta el ministro de Educación Selioni se refirió al tema. Facebook crece constantemente. Hoy miles de jóvenes se autoconvocan para faltar a clases o cientos de programas y medios de comunicación lo utilizan como puente entre ellos y su audiencia. No se vislumbra un techo. Lo que si queda claro que la relación entre los medios y la gente con la aparición de Internet y de las redes sociales está cambiando. La pasividad con la que solíamos ver televisión o escuchar radio (incluso ver una película) quedó atrás. Hoy nos exigen participar, opinar, mandar nuestra foto o video, componer nuestras propias canciones para ser reproducidos por doquier y ante cientos de miles de personas. El fiel reflejo de esta tendencia es Facebook y éste es su poder.