La buena marcha de una compañía no solo depende del trabajo y el esfuerzo diarios. Aunque son esenciales, para que se mantenga en el tiempo, también es necesario contar con un equipo humano motivado e identificado con los valores de la marca. Más allá de los incentivos personales, muchas organizaciones muestran cada vez más empatía con el turismo MICE (acrónimo en inglés de encuentros, incentivos, conferencias y ferias). Y Andorra es uno de los destinos líderes para la celebración de estas actividades “extralaborales”.
El Principado de Andorra posee, de por sí, un gran atractivo natural. Pero, en los últimos años, ha empleado grandes esfuerzos para complementarlo con una amplia variedad de actividades y emplazamientos en los que dar cabida al turismo MICE con todo tipo de oferta y todas las garantías. Desde actividades de Team Building hasta congresos con tiempo libre para los participantes. Las actividades y convenciones de empresa en Andorra son todo un privilegio.
Argumentos a favor de organizar eventos y convenciones de empresa en Andorra
Cerca de 40000 plazas hoteleras, un Centro de Congresos de 4200 m2 y un emplazamiento natural envidiable, con actividades aptas tanto durante las estaciones más frías (esquí, paseos en trineo, rutas con raquetas de nieve…) como las más calurosas (Caldea, eventos gastronómicos, fallas…). Estas son las características más valoradas a la hora de organizar eventos y convenciones de empresa en Andorra:
- La ubicación. Su proximidad con los países vecinos es uno de los principales puntos a favor. Las vías de comunicación con Andorra la Vella son numerosas y facilitan el acceso desde los grandes centros urbanos de España y Francia.
- La capacidad para encuentros empresariales. El Centro de Congresos, con un auditorio con capacidad para 900 personas y salas polivalentes, puede albergar todo tipo de convenciones de empresa en Andorra como los que se organizan desde Andorra Convention Bureau.
- La oferta lúdica. No todo es trabajar y Andorra, como uno de los centros del turismo MICE, lo sabe. Por eso, emplea todo su territorio (incluidos los Pirineos) para ofrecer un amplio abanico de actividades de ocio para los trabajadores desplazados.
Ya lo explicaba Conxita Marsol, Consejera Mayor de Andorra la Vella, durante el nombramiento de la ciudad como Capital Iberoamericana de la Cultura en 2016: 'Estamos relativamente cerca de todas partes, disponemos de muchos días de sol y de un clima privilegiado y, además, contamos con un centro de congresos espectacular y con un nivel de seguridad ciudadana que pocos países tienen'.