Revista Insólito
Eugenio Bartolomé, recoge estos días en su blog, la leyenda de Laurentino Ruesga que habla del viaje emprendido por dos amantes. Se dirigen hacia la costa y deben atravesar las escarpadas cumbres del norte palentino. Al pasar cerca del Curavacas ven el lago. La quietud de sus aguas y su transparencia cristalina les sorprenden. El azul del cielo y las cumbres cortadas del Pico se reflejan en la superficie. El paisaje es ensoñador y se detienen a descansar un instante...Como bien expone Miguel Angel Madrid Gómez, otro amante y promotor de estos lugares, el pozo que da orígen a esta leyenda se encuentra en una verdadera hoya que se forma en la ladera norte del Curavacas, junto a una antigua morrena glaciar. La vista de la cara norte desde este punto, es uno de los paisajes más espectaculares de toda la Montaña Palentina y solo por contemplarlo unos instantes merece la pena llegar hasta aquí.
Para saber más:Las Leyendas del lago Curavacas, por Laurentino Ruesga Herreros Publicaciones de la Institución Tello Téllez de Meneses nº 68Rutas por Fuentes Carrionas por Miguel Angel Madrid GómezRutas por la Montaña Palentina, Miguel Ruiz AusínLeyendas y tradiciones, Eugenio BartoloméImagen:el diario montañés