Según datos del Instituto Nacional de Estadística, la tendencia a diez años es que en España residirán casi 10 millones de personas mayores de 65 años, 1,5 millones más que en la actualidad. Este envejecimiento poblacional implica una mayor tasa de dependencia y requiere el aumento de las prestaciones y servicios enfocados hacia el bienestar y el mantenimiento de la calidad de vida de la tercera edad.
Hay numerosos datos para reflexionar, por ejemplo en la actualidad el 17,4% de la población tiene más de 65 años y pasaremos a un 25% en 2030 y un 32% en el 2050.
Hoy 2,5 millones de personas tienen más de 80 años, serán 3 millones en el 2.023, 4 en el 2.030 y 6 millones en el 2.050. La esperanza de vida en España en 2.007 era de 84,3 años en mujeres y 77,8 en hombres. Según los últimos estudios, la esperanza de vida para los que nacen en 2014 es de 102 años.Y un dato muy preocupante para el futuro del sistema actual de seguridad social, de 4 personas en edad activa por persona mayor pasaremos en sólo 1,7 en el año 2050.
Ante este panorama recogemos las declaraciones de Jorge Guarner, CEO de SARquavitae, que realizó para el diario La Vanguardia, según Guarner, el envejecimiento de la población es un problema más grave que el cambio climático y por otra parte, el envejecimiento no se está percibiendo como un problema en los entornos políticos. Para el empresario, en los últimos 50 años se han experimentado una serie de cambios sin precedentes que han ocasionado la prolongación de la esperanza de vida: la previsión es que los nacidos hoy tengan una esperanza de vida de 102 años, invirtiendo así la pirámide demográfica en nuestro país.
Es la española una de las poblaciones más viejas del mundo lo que supondrá un reto para el mantenimiento del sistema actual de prestación social. Una población envejecida supone un gran consumo de recursos: casi el 70% de los recursos sanitarios se consumen en los últimos 6 meses de vida y en pacientes crónicos, muy vinculados al envejecimiento.
En sus declaraciones Guarner se planteó varias cuestiones para hacer reflexionar sobre la vigencia del modelo actual, para Guarner es necesario contener el gasto en pacientes crónicos con nuevos modelos de atención incorporando las TIC para obtener mejores resultados económicos y asistenciales. La atención ambulatoria y en el domicilio, no sólo es económicamente más eficaz sino que también se adapta más a las preferencias de los pacientes.
También es necesario desarrollar un marco normativo estable y uniforme con seguridad jurídica, que permita generar inversión y reordenar servicios de valor añadido y poner en marcha un sistema de cofinanciación público-privada, que permita en el sector mantener el nivel de servicios adecuados. En definitiva, potenciar la sostenibilidad del sistema.
Revista Salud y Bienestar
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