Revista Salud y Bienestar

El presidente de la Sociedad Británica de Bioquímica, Tom Blundell, explicó el nuevo modelo para crear fármacos personalizados

Por Fat

En su paso por España para participar en el XXXIV congreso de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM) en Barcelona, Tom Blundell, presidente de la Sociedad Británica de Bioquímica, ha explicado esta mañana en que consiste su revolucionaria vía para la terapia personalizada: fármacos basados en fragmentos (FBDD en sus siglas en inglés). La clave para este diseño de fármacos a medida se puede encontrar en el conocimiento de la estructura dimensional de las moléculas del fármaco, al igual que la de las dianas con las que debe interactuar en las células, ya que estas moléculas funcionan al encajar unas con otras.
«Hasta los años ochenta la mayor parte de los fármacos se encontraban por casualidad y en la mayoría de los casos sin que se conociera la diana sobre la que actuaban», ha explicado Blundell en un encuentro con periodistas en la Fundación BBVA en Madrid. «Ahora, la mayoría de los fármacos en desarrollo se basan en la identificación de una diana y en el conocimiento de la estructura tridimensional y del fármaco».
Lo primero que hacen los investigadores es identificar moléculas muy pequeñas que interactúen muy bien con al menos una parte de la diana en cuestión y las que «después se hacen crecer químicamente a medida», ha indicado Blundell. Según sus estudios, este método «produce moléculas que encajan muy bien con la diana, con propiedades químicas muy interesantes. En la jerga decimos que exploramos el espacio químico de la forma más efectiva».


-Aplicaciones ilimitadas
Este método ya está siendo aplicado por la compañía cofundada por Blundell, Astex Therapeutics, que en la actualidad cuenta con cinco fármacos antioncológicos basados en este concepto, que también se aplica en estudios contra la tuberculosis. «La Fundación Bill y Melinda Gates se interesó por los nuevos métodos», ha apuntado Blundell, por lo que se decidió establecer una línea de investigación paralela ajena a su compañía y financiada por dicha fundación, centrada en esta enfermedad.
Blundell, experto en biología estructural y bioinformática, cree que la primera beneficiaria con los fármacos basados en fragmentos será la oncología. «Cada tumor tiene mutaciones que evolucionan muy rápidamente de forma muy específica. Ahora podemos secuenciar el genoma de tumores individuales e identificar las mutaciones», ha señalado Blundell. «En muchos casos esto nos permitirá identificar las mejores dianas para cada paciente».


-El modelo de las farmacéuticas no es sostenible
Durante el encuentro, el presidente de la Sociedad Británica de Bioquímica también ha declarado que el modelo actual de las empresas farmacéuticas no es sostenible ya que «se necesitan moléculas que no conlleven un riesgo económico y el coste para desarrollar un fármaco ha crecido de forma exponencial». Por eso ha resaltado la labor de las universidades europeas, las cuales «realizan un trabajo muy bueno, centrado en un enfoque interdisciplinar para poder tener buenas ideas en ámbitos o enfermedades en los que no estén dispuestas a invertir las grandes compañías porque no obtienen ganancias».
«Hay buenos investigadores en Europa, pero es caro financiar los proyectos», ha resaltado Blundell, quien ha apuntado que todos los gobiernos «van a financiar en un futuro sólo los proyectos que generen riqueza y puestos de trabajo para su país», así que ha señalado que Europa va a perder parte de la industria farmacéutica porque «la inversión va a ir a China, India o Brasil, perdiendo así la oportunidad de que los jóvenes puedan contribuir en estas áreas fundamentales». Además, ha aludido de forma directa a Pfizer, farmacéutica que ha reducido a menos de la mitad su plantilla en Reino Unido.


**Publicado en "VOCENTO"


Volver a la Portada de Logo Paperblog