Según parece una semana atrás estuvimos al borde de la extinción como especie. Pero no ha sido la primera vez ni será la última. De lo sumamente agradecido que me encuentro he decidido compartir con vosotros la primera referencia escrita a un cataclismo mundial.
El "primer fin del mundo", al contrario que el actual -fruto de la malinterpretación del calendario maya- si que se encuentra científicamente probado y justificado. Diluvio como tal nunca existió, hecho que está corroborado por las fuentes arqueológicas. Si no se produjo el Diluvio, si que debió existir una gran inundación. Por lo tanto, tampoco no se trató lo que las tablillas cuneiformes y el Antiguo Testamento nos reflejan pero si podemos asegurar que ocurrió algo lo suficientemente catastrófico para que quedara impreso en la memoria colectiva de las primeras sociedades que ha pervivido durante milenios ya que todas las culturas (precolombina, judeo-cristiana, china..) han creído en un gran cataclismo relacionado con el agua, salvo los musulmanes, que lo relacionan con el fuego.
El protagonista del Diluvio tiene varios nombres: para los sumerios fue Ziusudra (zi significa vida, u días y sudra, largos), Utanapistim (utu encontrar, napistum vida. Encuentra la vida -inmortal) para los acadios. En acadio medio se llamó Athramhasis (el muy sabio), mientras que en la Biblia es Noé. Todos comparten un destino y unas características afines ya que se trata de individuos elegidos por el/los dios/es para ser salvados de las lluvias torrenciales que son enviadas para castigo de la humanidad.
Las fuentes más antiguas proceden de Mesopotamia, todas ellas aportan el dato de una inundación que motivó la destrucción pero que cuando llegó a termino, la vida siguió su curso. En el año 1.849, durante la excavación de la ciudad de Nínive, se encontraron unas tablillas que poseían referencias a la existencia del Diluvio Universal. Cuando se descifraron, se percataron de que esos poemas hacían clara alusión al Diluvio mencionado en la Bilbia. Concretamente se hace referencia en cuatro textos:
- En la Lista Real sumeria -WB 444- se cita textualmente "el Diluvio llegó y la monarquía cayó del cielo".
- El Poema de Gilgamesh, tanto en su versión asiria como babilónica, recoge la narración completa del Diluvio Universal (tablilla XI).
- En la Epopeya de Athramhasis -copiada en múltiples ocasiones, por lo que se han encontrado hasta 7 versiones diferentes- se relata como el dios Enlil desea aniquilar a los hombres mediante el envío de plagas; finalmente enviando el Diluvio. Ea es el que protege a la humanidad, el padre de los humanos. Se recogen las instrucciones que Ea da a Athramhasis para que construya un barco y se ponga a salvo.
- Finalmente, en la Biblia, en el Génesis VI-VIII, se recoge la narración del cataclismo, siendo una copia con diferencias y parecidos con los demás textos anteriormente citados.
El autor Beroso (s. III ANE, Babilonia) recoge en su obra la referencia de peregrinos que subían al monte Ararat para recoger el alquitrán con el que estaban ensambladas las tablas del arca.
Constrastación arqueológica
Wooley, al excavar Ur, encontró una capa de arcilla de 4 metros de espesor que separaba dos estados estratigráficos, lo que fue traducido como la prueba del diluvio.
En otras ciudades (Ur, Kish, Uruk, Shuruppak, Nínive, Lagash) se encontró lo mismo, aunque ni la datación ni el espesor de la capa estatigráfica dónde se hallo el depósito de sedimento coincidió con la de Ur en la mayoría de los casos. Se llegó a la conclusión que se trataba de sucesos distintos, porque no coinciden cronológicamente pero que guardaban una raíz parecida. Para explicar estas "interrupciones arqueológicas", es decir, el vacío de restos arqueológicos se propusieron dos teorías:
- Hubo diversas y sistemáticas inundaciones de agua, que se debieron a un posible desbordamiento de los ríos Tigris y Éufrates, a un gran maremoto, a unas lluvias torrenciales muy fuertes o a una combinación de todas estas posibilidades.
- El Diluvio se trata de una metáfora, por una invasión de los amorreos (Amurru= inundación).
Cualquiera de ambos casos pudo ser interpretado por sus contemporáneos como síntomas o preludio del fin del mundo y por ello lo recogieron en su tradición cultural como un punto de inflexión en el desarrollo de su sociedad.
Acerca del Diluvio Universal, una geóloga llamada Plimer dijo que este habría suprimido todas las leyes físicas y biológicas, puesto que el monte Ararat, en Armenia, mide 5.315 m de altura, y para cubrirlo, hubieran sido necesarios 4.400 millones de km3 de agua, lo que a su vez, esto habría provocado el desvío de la órbita terrestre. Sin embargo, los geofísicos norteamericanos Ryan y Pitman analizaron sedimentos del Mar Negro y encontraron que el agua era dulce en los estratos más antiguos y que conforme se ascendía se tornaba salada. Es decir, que en el año 7.500 ANE se produjo un deshielo que habría elevado el agua del Mar Mediterráneo y lo que hoy es el Mar Negro, sería un gran lago de agua dulce, y ese deshielo habría hecho que se desbordase, decantándose por toda Mesopotamia llegando al Tigris y Éufrates. El problema se centra en porqué los hindués o los chinos también poseen su propia leyenda del Diluvio, en la cual, se dice que un guerrero traidor desgarra el cielo dejando caer las aguas celestes, salvándose Nu-wah.
Las ciudades antediluvianas
Los textos sumerios señalan que Eridu fue la primera ciudad de la historia donde dos reyes gobernaron 63.400 años. Después la realeza se trasladó a Badtibira, segunda ciudad de la historia. Según la lista real estuvo especializada en trabajos del metal, sobre todo cobre. Fue gobernada por 3 reyes que gobernaron 108.000 años. Tras eso, la realeza se situó en Larak, la cual no ha sido localizada. Un único rey gobernó 21.000 años, tras el cuál la realeza paso a Sippar donde estaba el dios Utu (Sol). Allí gobernó un único rey durante 21.000 años que fue quien enseñó a los sumerios la religión y la cultura. La última ciudad prediluviana es Shuruppak, actualmente Fara. Tuvo un rey, Ubar-Tutu, al cual la lista real lo hace padre de la persona que se salvó del diluvio, Utanapishtim (nombre acadio).
Obviamente con sólo prestar atención al prolongado tiempo por el que gobernaban estos primeros reyes nos percatamos que se trata de una construcción mitológica para asentar las estructuras de poder de los Estados sumerios y de ese modo autolegitimarse. Además había que dar cabida y proyección a una herencia anterior al Gran Diluvio.