Actas diurna populi romani
“El VII de las calendas de julio, en los predios de Cumas, que pertenecen a Trimalcio, nacieron 30 varones y 40 hembras. Se han transportado de las granjas a los graneros 500.000 bolsas de trigo y se han aparejado 500 bueyes. El mismo día fue puesto en la cruz el esclavo Mitridates, por haber blasfemado contra el genio tutelar de Cayo, nuestro señor. El mismo día se depositaron en la Caja diez millones de sestercios sobrantes. El mismo día estalló en los jardines de Pompeya un incendio que tuvo origen en la cabaña de Nasta». El Satíricon de Petronio (Noticias a modo de actas)
Las Actas diurnas se consideran el primer periódico de la historia.
En Roma a cada momento ocurrían cosas que podían afectar al estado. Los habitantes de la urbs siempre estaban pendientes de las noticias y rumores, sobre todo los que estaban lejos de Roma, la falta de información les angustiaba.
El método más eficaz de recibir noticias para los que vivían lejos, eran las cartas que viajaban con rapidez por los caminos de Roma. También si era una noticia de interés el destinatario pasaba las cartas de mano en mano. Pero este sistema no era tan rápido y fiable como se deseaba.
Cayo Tácito (55-132 d.C.), nos da noticia de las Acta Diurna Populi Romani.El acta se publicaba diariamente en forma de cartel. Las autoridades dictaban los escritos de carácter oficial en los que se consignaban, cuantas noticias y sucesos merecían importancia. Por orden de Julio César se colocaba en lugares muy transitados como el Foro Romano, y se custodiaba por legionarios.
«Una vez iniciada la función de su cargo, Julio César instituyó, el primero de todos, que las actas diurnas del Senado y del pueblo se confeccionaran y se publicaran».
De este modo las deliberaciones del Senado romano fueron hechas públicas en un diario de sesiones, donde se recogían taquigráficamente los discursos por medio de notas llamadas (tironianas). Augusto consideró peligrosa esta divulgación de las actas senatoriales y la prohibió.
Existían varias actas:El “Acta Diurna Commentaria Senatus”, relataba las obras diarias del senado.El “Acta Diurna Urbis”, relataba los acontecimientos diarios de la ciudad, asambleas populares y tribunales. El “Acta Diurna Populi Romani”, que incluía nacimientos, muertes, matrimonios, divorcios, eventos sociales y políticos y minutas de los negocios públicos.Los romanos conocían la importancia que la información podría tener para perpetuar los ideales del imperio y distribuían la publicación desde el año 59 a.C. de forma periódica aunque hay referencias del citado documento desde el año 131 a.C.En sus inicios las Actas se inscribían en planchas de madera pintadas con cal o en planchas de madera enceradas, pero para evitar falsificaciones o alteraciones se realizaron en metal o piedra, ninguna acta sobrevivió el paso del tiempo, pero se conservan copias en papiro realizadas por escribas.Al principio se daban solo en la capital romana pero pronto se comenzaron a hacer copias manuscritas sobre papiro. Normalmente los copistas eran esclavos cultos de origen griego, aunque también podían ser ciudadanos libres. La actividad se organizaba por unos editores llamados librarii, que vendían las Actas distribuidas en capítulos y en páginas, pero no en hojas sueltas.El “Acta Diurna” podía ser adquirida en las provincias del Imperio generando intereses comerciales derivados de la distribución y venta de dichas copias, extendiéndose así por todo el Imperio. Estas copias eran vendidas en establecimientos públicos, aparte de ser colocadas en tablones por todas las ciudades.
Cicerón fue un gran instigador de las copias, consideraba la información como instrumento de poder. Cicerón se rodeó siempre de buenos informadores que le mantuvieran al tanto de las cosas más importantes cuando él se ausentaba de Roma.
Muchas veces, más que copias íntegras, los nuntius o mensajeros, resumían las noticias que aparecían en las Actas.
En sus inicios el Acta Diurna publicaba resultados legales y edictos, pero posteriormente, también se publicaron noticias de sociedad como bodas, nacimientos, muertes legales, sucesos y rumores de interés popular. También aparecían algunos avisos publicitarios, como por ejemplo, ventas de grandes lotes de esclavos.
No todos los romanos eran instruidos y sabían leer, por lo que existió la figura del pregonero (praeco) un funcionario que durante un período de tres años se ocupaba de recorrer la ciudad comunicando oralmente las noticias, incluyendo sentencias judiciales, decretos o proyectos de ley.
Otros comunicadores eran:
Los “Strilloni” comunicaban información y publicidad comercial.
Los “Subrostani” vendían la información que poseían. Según cuenta Horacio, estos informadores complementaban la información para los interesados, las noticias solo sugerida o callada o breve de las actas públicas, y hasta fueron probablemente, autores de libelos, a cargo por ejemplo de Tiberio.
Los “Annales Maximi” eran otras publicaciones romanas donde se recogía lo más importante que había ocurrido durante el año: actos de poder, batallas ganadas, conquistas.El “Acta Pública”, trataba sobre logros comerciales, nuevas legislaciones… muy parecido a los “Annales” pero cambiando de periodicidad.A pesas de todo ello en Roma, no existía la libertad de información, debido a que el poder controlaba todos los medios de comunicación.COMPARTE LIBREMENTE. Pero agradeceria que se reconociera mi trabajo. Si vas a copiar algo del blog cita la fuente!