¿De qué va?
Tom Wingo (Nick Nolte), un chico de Carolina del sur, viaja al caos de la ciudad de Nueva York para relatar su infancia y hablar de su familia a la doctora Lowenstein (Barbra Streisand), la psiquiatra de la hermana de Tom, Savannah, que ha intentado suicidarse por tercera vez. Tom deberá viajar a sus recuerdos para ayudar a la doctora a conseguir encontrar el porqué de los intentos autolíticos de Savannah.
La crítica
Esta película, dirigida por la propia Streisand, nos habla de cómo se reacciona ante los sucesos traumáticos de la vida, sobre todo cómo marcan la forma de ser si suceden en la niñez.
El protagonista de la historia, Tom, es un hombre que rehúye los sentimientos de dolor mediante una infranqueable coraza de humor y sarcasmo. Cuando toca temas que prefiere no abordar simplemente cambia el rumbo de la conversación. Las reuniones que tienen lugar con la doctora Lowenstein la van obligando a enfrentarse a todo aquello que le da miedo recordar por ser demasiado doloroso y creer que no lo va a poder soportar.
La trama realiza un viaje regresivo al pasado de la familia Wingo, desgranando el escudo que tan fuertemente ha construido Tom. De esta manera los ojos del espectador se sitúan en la perspectiva de la doctora y descubrirá los eventos al mismo tiempo que ella. Lo que encontraremos tan fieramente escondido es un suceso atroz que fue el causante de las afecciones emocionales de Savannah y del comportamiento de Tom.
La película intenta ir más allá e introduce algún personaje más para remarcar esas carencias afectivas de Tom, como son su mujer, Sally, y el hijo de la doctora Lowenstein, Bernard. Son unas historias paralelas que completan la historia y le dan mayor profundidad, nutriendo al conjunto de mayor riqueza emocional.
Sin embargo, llegado al punto álgido de la rama argumental central, sobre la que giran dos tercios del filme, aparece otra película diferente: [¡OJO SPOILER!] una historia de amor entre Tom y Lowenstein.
Durante todo el proceso de regresión dentro y fuera de la consulta de la doctora se aprecia un flirteo entre ambos, más escondido en ella, pero debido al carácter de Tom lo achacamos más a su personalidad que a un interés real en ella, puesto que está casado y tiene tres hijas, además de haber comprobado, en las conversaciones que mantiene con su mujer que la quiere, pero que hay algo en él que no le permite ser el marido que debería ser.
Aun así, la película se toma la licencia para liarlos y desenlazar el nudo de la historia en un final que no tiene sentido, ni relación con el resto del filme. Un añadido que le resta valor al total de la película, quizás la única excusa es que la Streisand quisiera matute con el sr. Nolte.
Sea como fuere, en general es un filme que consigue llegar a la fibra sensible del espectador en el clímax del que hablaba anteriormente, aunque por el contrario no consigue cerrar la historia siguiendo el camino que había tomado, para al final diluirse en un desenlace sensibloide que personalmente me dejó fría.
Información de más
- La película consiguió siete nominaciones a los Oscars.
- Streisand dudó sobre el actor que debería interpretar a Tom Wingo. Los nombre que se barajaron fueron Kevin Costner, Don Jonhson y Jeff Brigdes.
- Cuando la NBC emitió por televisión la película, Barbra Streisand llamó a la cadena para pedir que bajaran el volumen de los anuncios publicitarios que aparecían en la pausa publicitaria puesto que su volumen era superior al de la película. Finalmente, rebajaron el sonido dos decibelios.
Nota final: 5