Agradecido por las sugerencias, comentarios, observaciones realizadas en la primera entrega. Lamento eso sí, que algunos no entendieron el mensaje y que cayeron en el terreno y en una polémica, que además de no tener sentido, no me interesa de momento. Además, para aquelos “polémicos”, les invito a leer la ética del discurso de Enrique Dussel, porque critican las actitudes de algunos porque los mandan a hacerlo, pero las conductas de sus “jefes políticos” supuestamente revolucionarios, que son tan iguales o peores que la de las personas criticadas por ellos, sencillamente miran para otro lado.
Bienvenido el debate y la crítica, lo cierto del caso es que yo no dejaré de decir ni de escribir mis verdades, por más duras que estás sean, incluso algunas de ellas, recogidas de los sentimientos e inquietudes de un pueblo que a veces no tiene la posibilidad de dirigirse a las autoridades o que le presten un poquito de atención. Afortunadamente, algunos personeros de peso han leído nuestros aportes, tomado nota y generado acciones que han contribuido a la satisfacción de reclamos y sugerencias de nuestro pueblo. Cuando eso ha sucedido, me he sentido satisfecho, porque es parte de la misión autoimpuesta que he asumido.
Algunos como que olvidaron el rol de liderazgo y de gran motivador que tenía y en buena medida aún tiene Hugo Chávez, pese a su no presencia física. Porque los cambios y las transformaciones no se dan ni por ósmosis ni por generación espontánea, hay que impulsarlos, hay que azuzarlos, hay que agitarlos. La partida física de nuestro Gigante Chávez no puede ser catalogada por menos que una tragedia histórica, y aún hay camaradas, compatriotas, compañeros y compañeras que no lo han superado, y hay que buscarlos, hay que hablarles, hay que motivarlos, para que no se pierda el legado de Chávez, para que no se pierda la Patria.
No podemos taparnos los ojos, y dejar de reconocer que la cosa está bastante complicada por donde uno la vea. Las amenazas contra la Revolución Bolivariana, están allí, latentes.
Sin duda, más allá de que “los sabios” enseñen a nuestro pueblo “ignorante”, se trata de lo que siempre dijo e insistió el Presidente siempre invicto, Hugo Chávez: ¡EFICIENCIA O NADA!.
Lamentablemente se enseña o se aprende con los hechos, con el ejemplo. El mismo José Martí lo dijo en alguna oportunidad: “La mejor forma de decir es hacer”, nadie desmerita la ideología, la formación, las palabras, pero hay que aplicar al dedillo aquella conseja popular: “A Dios rogando y con el mazo dando”.
Nuestro Presidente obrero, Nicolás Maduro y el Gobierno en general proclaman bastantes palabras: “basta ya de esto o lo otro”, sin embargo, en la calle el pueblo dice que hay muchas palabras y pocos hechos. Hay gente arrecha por las kilómetricas colas para comprar un aceite, una harina pan, azúcar o leche. Hay mucha gente que no quiere escuchar ni que le digan nada, sino que quiere resolver como resuelve su día a día y satisface sus necesidades mas elementales como alimentación, vivienda, vestido.
Pero eso no quiere decir, y era lo que siempre hacía Hugo Chávez, que a nuestro pueblo se le sembrará en nuestro sistema socialista de conciencia, de valores, de ideas. De eso se trata lo que también debemos hacer hoy en día.
Hay que buscar la manera de alertar al Gobierno, muy enfocado en cosas muy importantes como el Golpe de Estado, los movimientos sediciosos, etc., etc. pero quizá le está perdiendo un poco el pulso a lo que está viviendo la gente en el día , y sobre todo, PERCIBIENDO E INTERPRETANDO de lo que vive día a día. En resumen: que tiene un gobierno apendejeado que se está dejando meter el dedo en el ojo, y como que no puede con tanta vaina… La gente denuncia, alerta, avisa, se organiza, e igual los policías, GNBs, funcionarios, x, z, y, hacen desastre, hacen y dejan hacer, dejan pasar, y en fin, se percibe como un gran caos sin control… Muy, pero muy peligroso…
Ciertamente hay que refozar la idea fundamental, de que a pesar de todos los errores y fallas de X Gobernador, Z alcalde, Y funcionario público, etc, no por eso se puede traicionar al proceso revolucionario y pasarse al enemigo. Pero ciertamente que de eso está faltando bastante pero bastante.
Bueno, esto solamente son algunas impresiones. Les envío mis saludos y respetos a mis lectores y lectoras.
¡Bolívar y Chávez Viven, y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!