El recortar (no) se va a acabar

 Carcayú + Doc Pastor.
Adiós Mostra de Valencia, pásalo bien y ya nos llamamos. Hasta pronto salón del cómic de Zaragoza, escríbeme y me lo cuentas. Noche en blanco, no te olvides de actualizar tu estado y así sabré de tí.
Y siguen...
Mientras escribo esto tengo de fondo “Primera plana”, dudé si esa o “Buenas noches y buena suerte”, quizá poniendo un poco de periodismo cinematográfico no me pase y llame idiotas a los del gobierno, o subnormales a lo que deciden que es buena idea recortar en sanidad, cultura o educación mientras en otros sectores se mantienen gastos que no deberían, se permite que los políticos incumplan y los imputados gobiernan en un sistema que cada vez recuerda más a Little Italy y sus mafias controlando todo.
A lo largo de mis años por el mundillo de la divulgación, más desde que estoy con Ruta 42, he tenido la suerte de encontrarme con grandes de la cultura. No solo personas que protagonizan obras o escriben tebeos (que deberían tener, en muchos casos, un reconocimiento mucho mayor del que realmente tienen), también gente que desde sus posibilidades organizan eventos, comisarian exposiciones y hacen un gran esfuerzo para que muchas de esas iniciativas que tenemos cada día en las ciudades salgan adelante. Y no, en contra de lo que muchos piensan no tienen ninguna ayuda pública en una gran cantidad de casos.
Nuevos recortes se han anunciado, se cancelan eventos y se dice un “Hasta pronto” que es muy esperado en muchas ocasiones y en otras no es más que la despedida definitiva adornada, pero que no logra engañar a nadie. O sí, quizá en el futuro sea posible ya que si mantienes el circo la gente no se quejará, y total... si recortas un poco más en educación (que bastante mal iba ya en este país) no les quedará forma de pensar por su cuenta, no tendremos más que borregos.
“Cuatro patas bueno, dos patas malo”, creo que eso sería lo adecuado para ir llevando ahora en pancartas y camisas. Un eslogan que debería inundar la marea verde y las manifestaciones que se hacen en las plazas de las ciudades, que los políticos vean y escuchen. O no, todos sabemos lo que ha sucedido con el #15M y el poco caso que se le ha hecho, incluso sufriendo manipulaciones y denostaciones por parte de mandatarios y medios. Total, tampoco es algo a lo que no estemos acostumbrados.
Recortar en sanidad no es una buena idea, ya que hara a la gente débil y enfermiza. Recortar en educación es una mala idea, ya que hará que a la gente poco capaz de entender el mundo que les rodea. Recortar en cultura es una mala idea, ya que hará que la gente no pueda crecer mentalmente y poner en duda lo que les sucede alrededor. O precisamente por todo esto sea buena idea, si tienes a personas tontas y débiles, que solo precisan pan y circo, ¿cómo podrán oponerse a tí y dudar de lo que, en teoría, haces por ellos pero sin ellos? Despotismo ilustrado, supongo que a todos les sonará el término.
Se mantienen inútiles gastos oficiales, cargos que no sirven de nada y ventajas a personas que no las merecen desde ningún punto de vista y que, curiosamente, son en su mayoría de un mismo estamento social, pero de nuevo (es así) estamos acostumbrados.
La educación, y más la de a según que edades, debería ser intocable más todavía mientras otras personas de cargos públicos acuden a su trabajo en coches pagados por dinero de todos, sus vacaciones se pagan del mismo sitio a pesar que no cumplen lo que deberían y ya de principio reciben exageradas cantidades que bien podrían recortarse y ser usadas para fines más necesarios, por ejemplo mejorar los materiales de muchos colegios.
Pero claro, ¿acaso importa?
Pan y circo. Pero no hay que olvidar que luego vienen los leones.