Ya no sabes si es una broma pesada que pone a prueba los corazones de Merkel y Sarkozy o es verdad el referéndum y lo que han hecho la cancillera alemana y el presidente de la república es obligar al presidente de Grecia a cambiar sus palabras en menos de 2 horas, me imagino que de forma cuanto menos sospechosa.
Nunca creo que sepamos lo que se cuece en la trastienda política europea, salvo que aparezca un wikileaks en el viejo continente, cosa que muchos agradeceríamos para poder ver la verdadera cara de muchos políticos que dirigen nuestras vidas. Sin embargo, podemos intuir que ha sucedido en esta ocasión.
Por un lado está Papandreu que, presionado por las sucesivas huelgas de los ciudadanos helenos, no ve otra vía que no pase por escuchar y hacer suyas las pretensiones populares.
Por otro lado esta la deuda griega, que de todos es sabido, fue comprada en su momento en su inmensa mayoría por bancos alemanes y franceses.
Con estos dos aspectos en liza al mismo tiempo, no hace falta ser físico nuclear para entender que esta mañana, cuando Sarkozy y Merkel han escuchado las palabras del 1er ministro griego, han pensado dos posibles soluciones:
- Obligar al desesperado líder griego mediante la presión, el chantaje y la amenaza a que rectifique sus palabras y anule el referéndum.
- Sincerarse con los inversores de sus respectivos países, hacerles ver que por su ególatra obsesión de sacar plusvalías a sus ahorros permitieron a sus bancos especular con deudas descomunales y que esta vez han perdido, en concreto todo!
Vamos a ver como fluctúa todo este río de noticias en el que se ha convertido el supuesto referéndum griego, porque conforme escribimos las noticias no cesan.