El clamor de las críticas ha llegado evidentemente a los oídos de Plácido Domingo, quien fue claramente manipulado por las autoridades culturales cubanas, y ahora hace declaraciones en retroceso a sólo unas horas del debut habanero del tenor de 75 años.
Nunca es tarde para debutar, dirá Plácido Domingo, quien reconoce haber dilatado mucho su concierto en La Habana, el cual lamenta que no sea en un espacio de mayores proporciones para llevar a mayor cantidad de cubanos.
Si el público queda satisfecho con el concierto del sábado quiero volver, porque yo quiero cantar para toda La Habana, declaró en el Gran Teatro Alicia Alonso, donde fue recibido por la prima ballerina assoluta en persona.
Este sábado 26, el afamado cantante brindará un concierto en el mencionado teatro, aunque indicó que desea retomar su idea original de cantar en una plaza pública para que muchas personas tengan acceso.
Por razones que a la razón no convencen en la Habana le quitaron la idea de la cabeza a Plácido culpando esta vez las ambiguas condiciones del tiempo. Esperemos que el embargo de los EE.UU contra Cuba no haya sido una de las causas que se manejaron para la colocación del concierto en un lugar de capacidades limitadas, ofreciendo acceso sólo a personas escogidas por el régimen.
Ante las ambiguas condiciones climáticas en estos momentos le recomendaron actuar en un espacio cerrado y bajo techo, así que vino de todos modos para cumplir con una ilusión postergada demasiado tiempo, y porque ya era indispensable venir, dijo literalmente Plácido Domingo.
La vamos a pasar muy bien, prometió el tenor considerado una leyenda viva de la ópera y uno de los más altos exponentes del arte lírico universal.
Con información de Prensa Oficialista Cubana.
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