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La actriz asegura que le encantaría volver a la serie que la encumbró
Desde que el pasado 19 de enero Katherine Heigl anunciara que no le importaría en absoluto regresar a Grey's Anatomy (sólo le faltó besar una foto de Shonda Rhimes y apretarla con fuerza contra su pecho), se ha abierto una auténtica guerra mediática sobre cual debería ser la respuesta de la creadora. "Me encantaría retomar el punto en donde Izzie se quedó. Mi idea es que a ella le ha ido muy bien en otros hospitales. Siempre ha sido un poco vacilante a la hora de tomar deciciones y ha llegado el momento de que vuelva a tomar el control".
No obstante, no todo va a ser un camino de rosas para Heigl. Tras su famosa espantá en 2010 para centrarse en su incipiente carrera cinematográfica, hecho que obligó a Shonda Rhimes a darle un repentino e inverosímil final a su personaje, hay muchos que afirman que no sería políticamente correcto volver a acogerla con los brazos abiertos. Y mucho menos después de las envenenadas palabras que la actriz espetó contra la serie que la ha dado a conocer.
Izzie Stevens ha sido siempre uno de los personajes más queridos del Seattle Grace. De hecho su actuación en la serie médica le valió un Emmy como mejor actriz de raparto en 2007 y al que Heigl no quiso grabar su nombre alegando "que no había trabajado los suficiente para merecerlo". Sea como fuere, el historial paranoico de la actriz no termina ahí. Se rumorea que el 1 de marzo de 2010 tenía programada una cita en el set de rodaje de la ABC, pero no apareció. La actriz ha salido al paso de tales acusaciones y afirmando rotundamente su veracidad. ¿Hasta qué punto las palabras de Heigl son sensatas esta vez? ¿Debería Shonda permitir su regreso a la serie, después de todo lo que ha pasado desde la marcha de la actriz? Seguiremos informando.