El sarampión es una enfermedad infecciosa, con algunos parecidos con la rubeola o la varicela, frecuente especialmente entre niños y niñas. El virus es muy contagioso y se transmite a través de tos y estornudos, contacto personal íntimo o el contacto directo con secreciones nasales o faríngeas infectadas. La enfermedad provoca manchas rojizas en la piel y fiebre, pero si se complica puede causar inflamación en los pulmones y en el cerebro, pudiendo llegar a ser mortal. Aunque no hay una terapia específica para tratar la enfermedad, se puede prevenir mediante la vacunación y algunos de sus efectos pueden atenuarse con una buena nutrición, una ingesta suficiente de líquidos y tratamientos contra la deshidratación, la neumonía y las infecciones.
Para ampliar: “Sarampión”, Organización Mundial de la Salud, 2019
Antes de la distribución generalizada de la vacuna a partir de 1963, cada dos o tres años había importantes epidemias de sarampión que llegaban a causar más de dos millones de muertes al año, siendo los menores de 5 años y los mayores de 30 los más afectados. Gracias a la vacuna, se calcula que entre 2000 y 2017 se evitaron 21,1 millones de defunciones y, a nivel mundial, ...
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Nombre de usuario Contraseña Recordar cuenta Recordar contraseñaEl regreso del sarampión, una enfermedad que iba camino de ser erradicada fue publicado en El Orden Mundial - EOM.